«Seguimos creyendo porque las matemáticas nos dicen que se puede y porque en el fútbol a veces pasan cosas imposibles». Son palabras de Rodri Martínez con el CD Toledo como destinatario. Y es que, el jugador se resiste a bajar los brazos, aunque admite que las opciones son remotas.

Restan cuatro jornadas, con 12 puntos en juego, y el cuadro verde tiene el listón de la salvación 10 por encima. La siguiente misión será ganar el domingo al CF La Nucía, como forma de dar continuidad al triunfo cosechado en El Ejido y redimirse en el Salto del Caballo. Y es que, el vallisoletano admite que en su propio estadio «está el debe», y siente que hay una espina clavada con los aficionados. «Están teniendo un comportamiento irreprochable, digno de meción, y vamos a darlo todo para agradecérselo como se merecen», añade el mediocentro.

Desde su punto de vista, es un partido que puede provocar unas condiciones favorables, con el equipo alicantino jugándose el primer puesto. «Espero que les pese el nerviosismo de tener que proponer, lo que te lleva a cometer errores», dice. Si bien, para Rodri, La Nucía es un rival «muy fuerte y defensivamente poderoso». Sí es verdad que ellos sienten que se han quitado parte de la presión en forma de losa que tenían meses atrás, pero necesitan demostrarlo sobre su césped, el del Salto del Caballo.

Respecto a la salvación, hay otro dato que aporta esperanzas al centrocampista, y es que «en el grupo no hay ningún equipo que no se esté jugando nada, así que eso puede correr a nuestro favor porque a los que están por encima les van a quitar puntos los de arriba».

Pero mirándose a uno mismo, Rodri también pone encicma de la mesa la racha del CD Toledo de un mes sin perder. Y, extendiendo más el margen, solamente ha tropezado una vez en los últimos nueve encuentros. Pero la rémora de la primera vuelta es demasiado grande. «De haber tenido más a favor ese punto de azar, todo hubiera ido de otra manera», concluye el futbolista verde.