La fase en la que esté o entre una provincia no será determinante para las medidas de desescalada que se adopten en sus residencias. Lo señaló esta mañana la portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández: «Las personas mayores merecen nuestra atención, son nuestra obsesión, son muy vulnerables a esta enfermedad y estamos muy preocupados con lo que pueda pasar en las residencias».

Para tener  un cuidado especial con estos centros, muy castigados en esta crisis sanitaria, las decisiones de desescalada se irán tomando residencia por residencia, con independencia de la fase en la que esté su provincia. «Que haya provincias que pasen a una fase determinada no quiere decir que las residencias vayan a pasar a esa fase que con carácter genérico ha descrito el Gobierno», indicó. Apostilló que «las residencias en el País Vasco o Extremadura no tienen por qué tener la misma situación que las que están en Madrid, Castilla y León o Castilla-La Mancha».

La portavoz del Gobierno regional explicó que se ha creado un Comité de Seguimiento Específico para analizar la situación que tiene cada residencia, que irá sumando además toda la labor de inspección y de controles que se ha venido realizando. «Las decisiones que tome el Comité no van a estar basadas en la fase de la provincia, sino en la situación individualizada de las residencias», recalcó.

Para ello será clave la «vigilancia exhaustiva de cómo está evolucionando la pandemia centro a centro». Fernández aclaró que el objetivo de tanta cautela es «evitar un posible rebrote en centros socio-sanitarios, que es lo que más nos preocupa».

Recuerda que en estos centros «se encuentran personas mayores, que a veces tienen pluripatologías, que los hacen especialmente vulnerables a la enfermedad». Aunque más de la mitad de las 400 residencias de la región han tenido contagios de coronavirus, la portavoz añadió que también es clave que aquellos centros que han estado limpios de coronavirus no tengan casos «por alguna visita, algún incumplimiento o circunstancia excepcional». Aunque recalcó que la mayoría de los centros «lo están haciendo bien», precisó que eso no quita para seguir vigilantes.