El alcalde de Montesclaros, José Joaquín Manzanas, temía que el vandalismo pudiera arruinar el mimado récord Guinness previsto para el pasado domingo y anunció que multaría con 1.000 euros un acto de sabotaje. El hito se consiguió sin problemas. Pero el regidor no esperaba que los malhechores tuvieran en su punto de mira los carteles que informan de los caminos públicos a los senderistas. «Lo único que me pregunto es qué mal hace una señalización de los caminos públicos», lamentaba ayer en palabras a este diario.

El Ayuntamiento de Montesclaros, una localidad de unos 400 habitantes de la Sierra de San Vicente, ha presentado denuncia en la Guardia Civil por el uso de pulverizadores de color azul que han borrado la información sobre los caminos del pueblo. Se trata de unos carteles grandes que detallan, por ejemplo, el camino de 'Los Caleros', incorporado recientemente a la red de senderos de la Diputación. Los objetivos vandálicos lucían apenas desde hace tres meses.

El Ayuntamiento de Cuerva, en los Montes de Toledo, lamentó también el robo de los plantones y protectores que colocó el pasado 27 de marzo con la ayuda de los vecinos. «Con esa plantación pretendíamos aumentar la zona arbolada y de sombra en la pradera del Gamonal», explicaba el Consistorio en un mensaje difundido hace una semana, en la víspera de la Semana Santa. De esta manera, el Ayuntamiento ha perdido los árboles donados por la Diputación y los protectores colocados para asegurar su crecimiento.

Semana Santa: desmadre vandálico en los pueblosEl Ayuntamiento de Marrupe, un municipio serrano de apenas 150 habitantes, denunciaba también los ataques contra la decoración floral de la localidad. «Parece ser que hay a quien no le gusta que el pueblo esté bonito con plantas o árboles. Cuando no son arboles rotos o partidos por el tronco, son los lilos (en plena floración), y si no, los rosales», censuraba el lunes.

Por su parte, el Ayuntamiento de Ocaña difundió diferentes fotografías del estado en que quedó el paraje natural de 'La Aldehuela' tras estos día festivos. «Requiere un cuidado de todos para poder disfrutarlo», resalta.

No obstante, los trabajadores municipales se encontraron el lunes con un lugar totalmente sucio, con botellas, bolsas, restos de comida, latas o vidrio. De esta manera, los servicios de limpieza de la localidad se emplearon a fondo para devolver la limpieza a uno de los rincones favoritos de los vecinos de Ocaña.

Semana Santa: desmadre vandálico en los pueblosPor último, el Ayuntamiento de Castillo de Bayuela informaba también durante la Semana Santa de un incendio originado en el punto limpio municipal. El Consistorio no confirma que se trate de un acto vandálico, pero la reflexión evidencia que es la primera opción. «Desconocemos los motivos que han provocado las llamas, pero lo que sí que sabemos es que al Ayuntamiento va a tener que pagar la reparación del contenedor, gasto que pagamos todos los vecinos y que se tendrá que retirar de otras partidas más necesarias», lamentaba el consistorio bayolero.

Cada año, los ayuntamientos destinan parte del presupuesto a corregir los desmanes de los vándalos, que abundan en días festivos como la Semana Santa.