Los bomberos del Consorcio del parque de Orgaz recibieron el domingo, a las 15:16 horas, un aviso que prometía el uso de cuerdas para llegar a la víctima. Efectivamente, un agente se descolgó por un pozo profundo para poner a salvo una vida comprometida. Ocurrió en el término municipal de Mascaraque, una localidad de Los Montes de Toledo con apenas 400 empadronados.

La víctima era un animal. Un perro que se precipitó por el pozo de Mascaraque y fue entregado finalmente a su dueña tras una intervención de los bomberos del Consorcio de más de una hora de duración. Justo una semana antes, el día 5, los agentes del parque de Belvís de la Jara se desplazaron al municipio de Calera y Chozas para recuperar el cadáver de una cigüeña, un despliegue que pasó inadvertido en este municipio cercano a Talavera.

Se trata de las dos últimas salidas de los bomberos del Consorcio para rescatar a animales, una constante entre sus objetivos de trabajo. Desde el año 2016, los agentes de emergencias han atendido en la provincia un total de 217 servicios relacionados; muchos de ellos debidos a la retirada de enjambres de abejas.

En 2020, el año que la pandemia apagó la vida corriente, los bomberos del Consorcio mantuvieron un ritmo casi semanal de intervenciones relacionadas con el rescate de animales. Entonces, los agentes de los cinco parques (Illescas, Villacañas, Santa Olalla, Toledo y Belvís de la Jara porque faltaba por incorporarse Orgaz) completaron 39 salidas. La misma cantidad de la serie de 2016.

El resultado de la media anual de la serie comprendida entre 2016 y 2022 da 30 rescates al año de animales. La cantidad fluctúa notablemente según el ejercicio sin una tendencia clara. Porque a los 39 de 2016 sucedieron los 21 de 2017. En 2018, hubo 29; al año siguiente, descendió a 26. El año de la pandemia creció de nuevo hasta los 39, y en 2021, se precipitó hasta los 23. La inestabilidad continuó en 2022 con un total de 36 intervenciones de este tipo. En este 2023, de momento, los agentes han salido en cuatro ocasiones.

rescate en las barrancas. Entre estas intervenciones de los últimos ocho años, figura una disparatada ocurrida el 25 de agosto de 2020. Los agentes fueron requeridos para rescatar a un animal precipitado al Tajo en las Barrancas de Burujón. Finalmente, el dueño se equivocó, y el animal no alcanzó el agua. Los bomberos se descolgaron para salvar al animal, pero sí tuvieron que emplear una barca para auxiliar al joven de 27 años, que se había lanzado al río en busca de su mascota. Cuatro horas duró la salida.

Por municipios, según los registros correspondientes a 2022, sobresale Malpica de Tajo, donde los agentes del Consorcio provincial intervinieron en cuatro ocasiones durante el año por rescates de animales. Los bomberos solo repitieron en otras dos localidades por esta causa: Los Navalmorales y Villacañas, ambas por dos salidas en los 12 meses.

Por parques, el de Santa Olalla acudió el año pasado a 11 salidas por este motivo, más que Belvís de la Jara, Illescas y Villacañas, con seis cada uno. El servicio de Orgaz, con cuatro, y Toledo, con tres, completaron los 36 avisos atendidos en 2022.