Salió Víctor Hernández matar el que hubo de ser cuarto en sexto lugar. Con rictus serio recorrió el callejón desde la enfermería de camino a la tronera de matadores. Una cornada de 12 centímetros con una sutura en la enfermería y un vendaje compresivo para poder salir a lidiar su toro, sabiendo que la operación quedaba pendiente para la vuelta. Toreó con gusto y despacio con el capote. Brindó al público desde los medios y depositó la montera sobre las manoletinas y comenzó con un cambiado. Pronto empezó a ligar sobre el derecho pivotando sobre la pierna y encinturado. Por el izquierdo no tuvo tanta rotundidad de inicio. Dejó una tanda de muñeca suelta y vuelos ante un novillo que se abría mucho y había que guiarlo. Unas bernadinas muy ceñidas calentaron mucho el ambiente, hasta tal punto que con un gran espadazo paseó dos orejas, algo excesivas para el criterio habitual de la plaza, pero sin ningún pero a la actitud del torero.

Víctor Hernández echó por delante un Mayalde ancho de cuerna y rematado de riñones que embestía templado y al que el novillero hizo una faena que incomprensiblemente no tuvo más eco en el tendido, más allá de alguna protesta. Dejó un ramillete bueno de naturales y las manoletinas no levantaron el vuelo. La espada viajó contraria y desprendida, y saludó una ovación desde el tercio.

El gordo del sorteo salió en segundo lugar marcado con el número 17. 'Hospedero' traía un cortijo en el hocico que arrastraba por el suelo y en esa encornadura que giraba haciendo el avión. Jorge Martínez mostró disposición pero le faltó compromiso. Cuando se la dejó y le corrió la mano el novillo respondió pero faltó la rotundidad necesaria. La espada viajó media y caída, y se pidió la oreja. Como era lógico dio la vuelta al ruedo, y se le protestó. Las cosas.

Hernández volvió a estoquear su segundo novillo tras ser intervenido en la enfermería de una cornada de 12 cm. - Foto: Dominguín.

Se corrió turno y ante el cuarto salió Jorge Martínez. El Chorlito que habría de haber hecho 5°, lo hizo bien en los primeros tercios, pero ante la muleta de Martínez pareció perder voltaje la faena. Algún muletazo suelto, propio de quien torea en todas las ferias, pero nunca terminó de levantar el vuelo y conectar con el tendido. En el primer envite entró a matar y salió prendido en la cadera yendo baja la espada, en el segundo quedó arriba y el puntazo corrido fue en la cara interna del muslo y saludó una ovación.

El tercero comenzó haciéndolo bien en el capote de Christian Parejo. El gaditano quiso hacerlo todo muy despacio hasta que en el quite volteó a Víctor Hernández y el toro cambió el aire. Brindó al público y se puso a torear desde los medios con la derecha. Entre medidas había estado excelso Andrés Revuelta con el capote. El novillo embistió largo y Parejo anduvo queriendo pero le faltó un plus más. Cierto es que la voltereta que se dio el animal minó la condición y por más que el gaditano quiso entablar faena en las cercanías, acabó ante un animal aburrido y aculado en tablas ante el que solo pudo mostrar valor.

Se volvió a correr turno y salió el sexto. Un animal alto de agujas y escaso de humillación con el que Parejo estuvo muy firme. Embestía bastito, como era, y empezó a medir hasta que lo volteó sin consecuencias. Se embruteció y comenzó a medir y mató al encuentro, caída y contraria.

PARTE MÉDICO DE VÍCTOR HERNÁNDEZ: 'Herida por asta de toro en la cara anterior del muslo izquierdo de trayectoria ascendente de 12 centímetros que rompe aponeurosis y músculo recto anterior. Se sugiere que suspenda el festejo, pero el paciente se ve capacitado para continuar la lidia'. Firmado: Doctor López Martínez.'