Una más. Poco a poco la ciudad de Toledo va recuperando esas tradiciones que había mermado la pandemia. En esta ocasión, tocó recuperar la visita al cementerio para el reencuentro con los familiares y amigos que ya no están. Y, ni siquiera, la amenaza de lluvia lo impidió. Aunque sí hizo que la visita de los toledanos fuera más tímida de lo previsto. En la semana previa a la celebración, desde el ayuntamiento preveían una asistencia de cerca de 12.000 personas. Según fuentes policiales, todo hace indicar que no se alcanzaron esas cifras exclusivamente el día 1 de noviembre. Lo que sí apreciaron los agentes es que esas visitas fueron más repartidas durante el fin de semana que en otras ocasiones, quizás para evitar aglomeraciones.

Los responsables del camposanto destacaron que el fin de semana se ha desarrollado sin incindencias ni altercados. Tan solo mencionaron que se produjo una caída de una mujer al pisar una sepultura, y que fue en los días anteriores al puente de Todos los Santos. 

La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, asistió junto al Arzobispo, Francisco Cerro, a una misa en la capilla del camposanto a la que acudieron medio centenar de fieles. A su llegada al recinto, la regidora se mostró muy contenta por recuperar tradiciones como la del 1 de noviembre y agradeció que el tiempo lo haya permitido.

Un cementerio municipal que durante esta legislatura ha recibido una inversión superior al medio millón de euros por parte del consistorio, y con recientes reformas como ya anunció hace unas semanas la titular de Parques y Jardines, Marta Medina. 240.000 euros para  llevar a cabo las reformas del almacén o de los patios de San Andrés y San Antonio.