Damex Udea Algeciras: Juanmi López (4), Miki Ortega (16), Thiam (11), Vucica (13) y Aramburu (6) -quinteto inicial-, Córdoba, Mapaga (3), Álex Rodríguez (11), Wright (2), Díaz y Sene (2).
Baloncesto Talavera: Peris (10), Ganal (2), Álvaro Martínez (2), Archer (8) y Andrejevic -quinteto inicial-, Thomas (9), Meana (9), Castillo (5), Isaac (2) y Martín (3).
Árbitros: Fuentes León (Comité madrileño) y Patricio López (Comité andaluz).
Parciales: 20-15, 12-15 (32-30), 19-9 (51-39), 17-11 (68-50).
Pabellón Ciudad de Algeciras-Doctor Juan Carlos Mateo. 500 espectadores.
Baloncesto Talavera cayó en su visita a Algeciras en un partido donde mostró mucha indecisión en la parcela ofensiva. El cuadro talaverano, que ha perdido todos sus partidos a domicilio esta temporada, no gana desde el mes de noviembre y se coloca una victoria por detrás del Morón, al que se enfrentará en la jornada intersemanal en un duelo directo por la permanencia en la categoría. Por su parte, el equipo gaditano se reencontró con la victoria tras dos derrotas consecutivas -la última, en la prórroga ante Clavijo- y sigue en la lucha por la primera plaza del grupo oeste.
Talavera compareció en el Pabellón Juan Carlos Mateo con una versión algo desorientada que contrastaba mucho con el ímpetu inicial del cuadro dirigido por Javier Malla. Pese a esto, el conjunto talaverano supo mantenerse cerca en el marcador hasta la primera diferencia grande del partido, que culminó Vucica con un triple a falta de minuto y medio para la conclusión del primer cuarto. Esto obligó a Ricardo Úriz a pedir su primer tiempo muerto en busca de una reacción que fue inmediata. Thomas anotó un triple a cuatro segundos del final del periodo para poner a su equipo a cinco (20-15).
En el comienzo del segundo parcial, llegó el empate por parte del cuadro blanco, y desde ahí el partido tomó un color totalmente distinto, con la intensidad y las imprecisiones muy presentes en ambos bandos. Algeciras tan sólo anotó tres triples de 13 intentos en la primera mitad, mientras que Talavera perdió 11 balones en el mismo tiempo, por lo que nadie logró despegarse en la anotación antes del intermedio (32-30).
Dos canastas rápidas del conjunto gaditano obligaron a Ricardo Úriz a parar de nuevo el partido para reajustar la defensa, pero aun así la diferencia se situó rápidamente en siete puntos. Talavera echó muy en falta a Andrejevic, uno de sus hombres clave -más todavía tras la marcha de Cooper- a la hora de generar puntos. Durante algo más de tres minutos, la escuadra talaverana no consiguió anotar hasta que Meana encestó una bandeja a poco más de tres minutos para el final del cuarto. Algeciras, en contraste, dejó de obcecarse con el tiro exterior y empezó a aumentar la diferencia por otras vías como los puntos en la zona (51-39).
El último cuarto no trajo consigo ningún tipo de reacción. Talavera tan sólo parecía fluir en ciertos momentos en los que Meana asumía el control del equipo, y el triple que había salvado la actuación de los primeros dos cuartos no hizo acto de presencia (2/17 en la segunda parte). El último tramo, con el resultado ya decidido, sirvió solo para dar minutos a jugadores menos habituales y empeorar todavía más estos porcentajes.