La carrera por las elecciones hace tiempo que comenzó, y las encuestas de los distintos despachos demoscópicos van perfilando el camino que los partidos políticos van a tener que recorrer de aquí al 28 de mayo primero, con una cita con las urnas para decidir los gobiernos municipales y autonómicos primero, y en diciembre con una cita nacional, que culminará este año electoral que servirá para medir las fuerzas de cada uno, y valorar la gestión que se ha realizado hasta el momento en una legislatura marcada por la pandemia del coronavirus y la guerra en Ucrania.
Una de esas últimas encuestas, a la que ha tenido acceso La Tribuna, realizada por Metroscopia para el foro independiente Periodismo 2030, revela que el PSOE perdería escaños en la mayor parte de sus feudos en esas próximas elecciones generales. De hecho, las cinco mil entrevistas de la muestra señalan que PP y Vox podrían alcanzar la mayoría absoluta en las elecciones generales, mientras que el PSOE retrocedería entre 17 y 25 escaños en el Congreso.
Eso tiene su traslación a las comunidades autónomas, que no son ajenas a esta tendencia, ya que el PP ganaría escaños en la mayoría de las circunscripciones. En Castilla-La Mancha, la derecha podría dar la vuelta a la actual mayoría del PSOE, obteniendo, con los cinco escaños que le otorgan a Vox, un total de 14 diputados. Así, según este estudio, desde Castilla-La Mancha llegarían a la Carrera de San Jerónimo 9 diputados del PP, 7 del PSOE, y 5 de Vox. En la actualidad son 9 del PSOE, 7 del PP y los mimos para Vox.
De esas cinco mil entrevistas el PP es el que goza de mayor fidelidad entre su electorado, con un 78% de electores que repetirían su voto en las elecciones generales. Mientras, el PSOE mantendría un fidelidad de voto del 68%, llegando a alcanzar entre 95 y 103 escaños, frente a los 120 que representa en la actualidad. De este modo, el PSOE de Pedro Sánchez perdería escaños en Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Extremadura, País Vasco, Galicia y Asturias. De esta forma, el PSOE transferiría un 7% de sus votos al PP –es decir, medio millón de papeletas–, y un 3% a Vox.
No obstante, se hace constar en el estudio que el trabajo de campo se refiere a unas elecciones generales, y no a las autonómicas del próximo mes de mayo, «donde las dinámicas de decisión de voto no tiene por qué coincidir con el de las legislativas», aunque no descartan que estos resultados podrían considerarse como «un indicio» de la tendencia predominante en los comicios autonómicos y locales de mayo.
Cabe reseñar que este estudio aún no se ha publicado en su integridad, aunque se llevó a cabo el pasado mes de diciembre mediante esas cinco mil entrevistas, ya que forma parte de un estudio más amplio en el que pregunta sobre otras cuestiones y cuyas conclusiones están pendientes de publicación.