Tras un año largo desde Filomena y siete meses después de la Dana, en La Bastida, «al igual que los demás parques periurbanos, los avances son pocos, y los problemas muchos». Así lo define José Manuel Duarte 'el Zangre', expresidente vecinal y habitual agitador de las redes sociales con sus denuncias y demandas. En este caso, Duarte vuelve a La Bastida, espacio que ya repasara hace siete meses. Después de aquello, se han desarrollado trabajos, sobre todo, por parte de Geacam. Pero a tenor de sus denuncias, parece que las labores ejecutadas son insuficientes para recuperar el espacio de la nieve, el frío, el agua y las carencias previas.

En un amplio reportaje fotográfico publicado en redes con una gran acogida, Duarte recoge la situación de un espacio con el vallado, incluso junto a la ermita, muy deteriorado, por espacios podrido por el agua; caminos erosionados por las escorrentías de agua y la falta de drenaje; ramas secas desde Filomena, con peligro de caída; hierros en punta como restos de la antigua torreta de electricidad eliminada; guardarraíles peligrosos; fuentes que no funcionan correctamente; árboles rotos y ramas secas acumuladas; papeleras rotas; falta de mantenimiento en el reloj de arena; o carencias en el desbroce. Hay  drenajes total o parcialmente obstruidos, lo que lleva incluso a que haya restos de arena en la carretera.

Duarte reconoce que Geacam hizo lo que pudo con el poco tiempo del que dispuso, y reclama que es ahora el Ayuntamiento el que debe continuar con el trabajo. Se ofrece a visitar el espacio con los concejales que haga falta o los responsables de Parques y Jardines. De momento, ya ha elevado por las redes sociales una serie de reivindicaciones para mejorar todo el entorno.

La Bastida sigue arrastrando problemas en caminos y árbolesDemandas. Las demandas emitidas por Duarte comienzan por la necesidad de eliminar todas las ramas secas que quedaron en los árboles, «antes de que se caigan solas y produzcan accidentes». A eso une la necesidad de que se reparen  todos los caminos, con sus consiguientes drenajes lineales y que se desatasquen todos los tubos transversales para que el agua de lluvia no erosiones ni ensucie los caminos.

Duarte también ha pedido que se cambien las vallas de guardarraíl por vallados de madera, que además de ir más con el entorno, pueden evitar accidentes de cortes o golpes. También hay restos de hierros de un a torreta eléctrica que sería oportuno quitar, a la vez que de paso se reparan las de madera, se quitan chapa de un torre eléctrica y se cambia por protección de obra. Respecto a las fuentes, se podría «colocar un grifo del que el agua caiga en desagüe y no en los zapatos».

Otra reivindicación es la eliminación todos los restos de papeleras rotas, trozos de hierro, tocones astillados, restos de poda y ramas caídas.

La Bastida sigue arrastrando problemas en caminos y árbolesLa demanda a través de las redes solicita la reubicación de bancos y mesas, para que se coloquen en zonas accesibles a todas las personas, incluidas las que tengan alguna discapacidad o vayan en silla de ruedas.

Finalmente, Duarte se refiere a una peana que hay vacía, en la que pide que se le coloque una escultura; que el reloj de sol  sea restaurado; y que se coloquen carteles informativos y educativos de madera grabada con láser, que quedan mejor «que los de chapa clavada en los árboles».

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