«Hay que felicitar al Puertollano porque fue mejor en todo momento». Es la primera frase de Diego Merino tras el doloroso 1-4 encajado por el CD Toledo, y que supuso la cuarta derrota consecutiva en la Liga. Por primera vez, el técnico verde vio «a un equipo superado por la situación». Por eso, cree que es momento de «juntarnos y reflexionar».

Desde su punto de vista, son momentos de «aceptar todo lo que se diga». Entiende las críticas porque «no estamos bien». Además, recalca que en los anteriores encuentros fueron «detalles los que decantaron el resultado», pero en este no: «Hubo un equipo que nos superó en todo momento».

Sobre si se ve con fuerzas para continuar, el de Mérida sostiene que «hay confianza mutua» y remite a la celebración del 1-0 de Migue García, «muestra de que los jugadores creen en mí y yo en ellos». En este sentido, reconoce que si viera que el equipo no está con él, «daría un paso al lado». En cualquier caso, repite en varias ocasiones que la situación es «preocupante».

Merino prevé una semana «complicada» en la que «nos vamos a tener que decir muchas cosas todos». Es la hora de «hablar y tomar decisiones». Preguntado por un cambio de esquema o de jugadores, el entrenador pacense entiende que ahora mismo hay cabida para todo, con el objetivo de «buscar soluciones» para el partido contra el CD Marchamalo, que será este domingo a las 18:00 horas.

De momento, lo único que puede prometer Diego Merino es «seguir trabajando», pues «todas las opciones son válidas». Es más, no descarta «replantearse todo» para ver «cómo podemos ser más competitivos». Lo que no quiere Diego Merino es perder tiempo en las críticas vertidas en las redes sociales, ya que los pitos durante el encuentro son «comprensibles». Según su opinión, «la gente viene a ver ganar a su equipo y cuando no lo hace, es normal que no esté contenta». Por eso, asume que ahora mismo «nadie crea», por eso «hay que reaccionar y buscar esa victoria, que es la mejor medicina que puede tener el equipo».