Se trata de una de las metonimias más extendidas del castellano en la actualidad. A cualquiera que se le nombre la palabra «Falcon» piensa de inmediato en el avión con el que el presidente del Gobierno realiza, de forma alegre y frecuente, sus desplazamientos. 

Pero hablar de Falcon, es hacerlo de es una serie de aviones de negocios medianos de la compañía francesa Dassault Aviation, de los que se han fabricado más de 2.500 unidades.

Es cierto que la ciudad tendrá una de estas unidades, pero nada más lejos de la realidad. Al menos, de manera oficial, ninguno de los responsables políticos del Consistorio van a contar con una de estas aeronaves. Será la Universidad de Castilla-La Mancha la que sea depositaria de un avión TM.1, 11C-03 (Falcon 20), que junto con un motor de Phantom J79-GE-15A, con número de serie 439309A, ayudará a las prácticas universitarias de los alumnos del Grado de Ingeniería Aeroespacial principalmente.

Así lo destila la resolución 420/38475/2022, de 13 de diciembre, de la Secretaría General Técnica, por la que se publica el Convenio entre la Universidad de Castilla-La Mancha y el Ministerio de Defensa publicado en el BOE el 16 de diciembre del pasado año. En virtud de este acuerdo, de una parte, el General del Aire don Javier Salto Martínez-Avial, Jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire y del Espacio, y de otra Julián Garde López-Brea, Rector Magnífico de la Universidad de Castilla-La Mancha, «al objeto de ser empleados por la comunidad educativa con fines docentes, especialmente para las necesarias prácticas de laboratorio», como recoge el Boletín Oficial del Estado.

El mismo documento desgrana que ambos materiales están disponibles en el Ministerio sin que implique «un obstáculo para el cumplimiento de las misiones de Defensa que tiene encomendadas el EAE y sin que la citada aeronave forme parte del patrimonio histórico asignado al Servicio Histórico y Cultural del Ejército del Aire y del Espacio».

De este modo, la entidad educativa recibe los materiales adquiriendo el compromiso de incluir un cartel informativo que acompañe al bien cedido la leyenda «cedido por el Ministerio de Defensa/Ejército del Aire y del Espacio»; comprometerse a «la guarda y custodia en condiciones medioambientales»; garantizar al personal del MINISDEF que reúna los requisitos de acceso establecidos por el EAE y la Universidad, la reserva anual de dos plazas, sin coste económico para el personal del Ejército, en las diversas ofertas educativas o prácticas profesionales en el ámbito aeronáutico; y correr con los gastos de acondicionamiento, traslado, instalación, conservación y los de su eventual retirada y devolución. ?

Una entrega que se hará efectiva durante este 2023 sin que las partes hayan concretado de momento  la fecha exacta, pero a tenor de las dimensiones de la aeronave, con una longitud de 17,2 metros, una envergadura de 16,3 metros, una superficie alar de 41 m² y un peso en vacío de más de 7 toneladas, el mero hecho de su llegada al Campus de la Fábrica de Armas, será todo un acontecimiento.

A pesar de los intentos por concretar con el Ministerio de Defensa y el Ejército del Aire y el Espacio, ninguna de las instituciones han querido facilitar más datos de los que aparecen en el BOE.