Los primeros 6.000 test rápidos de detección del coronavirus validados este sábado por el Sescam se empezarán a efectuar mañana en las distintas gerencias de Castilla-La Mancha. Llegarán entre ellos a los 2.000 sanitarios en aislamiento, especificó el vicepresidente del Gobierno regional, José Luis Martínez Guijarro, así como al resto de grupos prioritarios: residencias de ancianos, ingresados con problemas respiratorios y personal esencial en esta emergencia sanitaria.

En una comparecencia pública, Gujarro indicó que «esta mañana (por ayer) se han distribuido los test rápidos para determinar la presencia del virus. Mañana se van a aplica a 2.000 profesionales sanitarios en aislamiento y al resto de grupos prioritarios», dijo.

En nota de prensa, la Junta de Comunidades informó de que siete vehículos del Cuerpo de Agentes Medioambientales de la Consejería de Desarrollo Sostenible distribuyeron los test a las diferentes provincias de la región para la detección del Covid-19.

Indicaron que a lo largo del día estos test irían llegando a las diferentes gerencias del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) con el fin de que puedan iniciar su realización cuanto antes en función a un protocolo diseñado en el que se establecen los colectivos prioritarios: profesionales sanitarios, residentes y trabajadores de residencias de ancianos sospechosos, pacientes ingresados en hospitales pendientes de decisión de aislamiento y personal esencial.

 Tal y como explico el secretario general del Sescam, Luis Ruiz Molina, estos test rápidos cuentan con la certificación europea y la aprobación de la Agencia Española del Medicamento y han sido validados por especialistas del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha. Además, ayer fueron remitidas algunas muestras Instituto de Salud Carlos III para que el Ministerio de Sanidad conozca el tipo de test adquiridos por el Gobierno de Castilla-La Mancha.

 «No nos hemos precipitado de la distribución del test hasta que tuviéramos todo bien documentado y bien acreditado de que van a cumplir la función para la que fueron adquiridos», indicó Ruiz Molina, quien recordó que estos test rápidos permiten establecer si una persona está infectada o no en apenas 15 minutos.

 Se trata de los primeros 5.850 primeros test rápidos de los 60.000 que ha comprado el Gobierno regional para la detección del coronavirus Covid-19. Está previsto que en los próximos días vayan llegando más unidades, aseguró la Junta.

« Con estos nuevos test rápidos será mucho más fácil y rápido detectar a aquellas personas afectadas por el Covid-19, permitiendo la adopción de decisiones más agiles en cuanto a la contención de la transmisión comunitaria de la enfermedad».