PP municipal afirma que Toledo necesita abrir el paso desde y hacia Madrid que es el principal surtidor de clientes para la economía local. Claudia Alonso lo pide a la vista de que los dirigentes socialistas, regionales y municipales, «por fin se dan cuenta de que sus políticas arruinan» a las empresas y los trabajadores y toman algunas medidas necesarias para dar un viraje al rumbo.

La portavoz del PP afirma que se han vivido 48 horas de «profunda vergüenza» por la «indefensión en la que sume a la ciudad García Page» cuando el lunes amanece en una fase sanitaria, por la tarde se crean expectativas de nuevas medidas, el martes se publica el cambio que por la tarde se modifica y por la noche rebaja de nivel.

Alonso lamenta la «soberbia ególatra de algunas (la alcaldesa) que abanderan» lo que no han hecho en un año y advierte de que los ciudadanos están «hartos de que se rían de ellos» desde todos ámbitos políticos y que ahora ya no se plantean las medidas en función de los intereses sanitarios.

En su opinión se ha transitado por «un limbo jurídico» que hace un daño profundo a la economía de la ciudad y ahora los criterios se relajan sin argumentos, si bien su lectura positiva es dar la oportunidad de que que puedan volver a trabajar va de sacar a la gente de la ruina.

Alonso, tras la reunión del Ayuntamiento y hosteleros, afirma que el PP apoya, «como siempre, sin fisuras y con todo el coraje», todas las reclamaciones del sector del turismo, de la cultura, de la empresa, de los autónomos, todos «los que no pueden trabajar porque no les han dejado» mientras la regidora ha estado «un año mirando a otro lado, dando falsas expectativas y haciéndose fotos».

La concejal del PP señala que dar ayuda es otra cosa y se queja de que el Gobierno local de Toledo «no baja impuestos ni anula tasas, no da ayudas directas» y «por fin, un año después, se da cuenta de la ruina de muchos negocios y de que esas empresas necesitan un Ayuntamiento cercano» que «nunca lo ha estado».

Sin embargo avisa que se vuelve a lanzar «por cuarta vez» el anuncio sobre la eliminación de la tasa para terrazas de hostelería cuando la realidad es que falta toda la tramitación (esta semana en Junta de Gobierno se aprueba la modificación de la tasa, tiene fase de alegaciones, comisión de Hacienda, Pleno, un mes de información pública…) y como pronto saldrá «en julio, año y medio después» (los funcionarios son más pesimistas, lo retrasan a septiembre). «Menos fotos y más hechos», reclama.

También protesta porque Toledo ciudad es la que hace el «menor esfuerzo fiscal y la que menos ayuda da de toda la región» (menciona Albacete, Talavera, Guadalajara, Ciudad Real donde han eliminado tasas de terrazas y basuras, y dan ayudas directas millonarias).

Su resumen es que todo es cuestión de «ideología» y elegir entre quienes optan por ayudar y abrir en libertad o los que prefieren cerrar, tener a todos en casa y hacer caer en el servilismo.