En la Serie A han saltado todas las alarmas. Las tenían a punto, pertinentemente preparadas como mucho de lo que ha hecho Italia contra el dichoso coronavirus. Esas alarmas se ponen rojas porque el Genoa acaba de anunciar 14 positivos en Covid-19: jugó este fin de semana ante el Nápoles -que está también con las 'luces' encendidas, pasando mil pruebas por si en un mal córner algún Lozano, algún Milik o algún Mertens respiró algo que no era suyo- y le tocaba jugar el fin de semana contra el Torino, partido que, lógicamente, está en el aire.

Ahora lanzo una pregunta con dos palabras: ¿pasará aquí? Un equipo, una burbuja, un grupo cerrado de control, como quieran llamarlo, de repente comunica un puñado de positivos. Además, puestos a imaginar, pongan un nombre guapo sobre la mesa: el Madrid, el Barça, el Atleti. Otras dos palabras: ¿qué pasará? Porque nadie lo va a decir en voz alta, por favor, pero imagino que habrá un protocolo y si no le gusta tengo otro bajo la mesa; es decir, seguir a rajatabla las normas… siempre que no se me caiga uno de los que venden mi producto más allá de nuestras fronteras.

No obstante, supongo que como usted, estoy muy tranquilo con Tebas y/o Rubiales a los mandos. Lo primero, ya lo veríamos, un repentino entendimiento entre ambos (es teatrillo, paripé, para mantener cada uno su estatus de irreductible polemista en la trona); lo segundo, reflejos extraordinarios para evitar polémicas como sucedió de forma ejemplar en el 'caso Fuenlabrada', con un equipo madrileño confinado en un hotel de A Coruña; y lo tercero, un calendario organizado al dedillo a pesar de que quizás en la jornada 20 tengamos a equipos con 16 partidos. No hay luces ni en las Navidades de Vigo para encender todas las alarmas que necesitaríamos como esto nos suceda a nosotros…