Rozalén estudió Psicología en Murcia, Josie hizo Periodismo y Humanidades en Madrid y Gonzalo Pérez de Vargas se graduó en Empresas en Barcelona. Igual que ellos, muchos castellano-manchegos han salido de su comunidad para estudiar y lo siguen haciendo. En el curso 2020-21 solo el 49,4 por ciento de los estudiantes que habían hecho la Evau en Castilla-La Mancha se habían quedado también en la región a estudiar una carrera universitaria. Hay que recordar que en la región hay universidad en todas las provincias, pues la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) está en Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo, mientras que la Universidad de Alcalá de Henares tiene facultades en Guadalajara. 

El dato lo recoge el Informe de la Fundación CYD 2021/2022. Hace una comparativa entre comunidades y Castilla-La Mancha es la segunda de la que más emigran los estudiantes. Solo La Rioja tiene un dato más bajo, pues apenas un 34,3 por ciento de los estudiantes riojanos se quedan en su región. En el resto de las comunidades autónomas consiguen retener al menos a más de la mitad de sus universitarios y la palma se la lleva Cataluña, con el 98,3 por ciento, Madrid, con el 94,9 por ciento y la Comunidad Valenciana, con el 90,3 por ciento.

primer destino: madrid. No hace falta hacer el grado en Geografía para intuir que en este éxodo de estudiantes castellano-manchegos influye mucho el hecho de que la región es extensa de por sí y que está rodeada de muchas comunidades autónomas. Además se le suma que una de esas vecinas es Madrid, que tiene una de las ofertas formativas más amplias del país y que está muy bien comunicada con varias comarcas de Toledo o Guadalajara. 

De hecho, Madrid es el principal destino de los universitarios castellano-manchegos que salen de la región. De los que hacen aquí la Evau, el 23,6 por ciento, casi una cuarta parte, acaba en la Complutense, la Autonóma, la Carlos III o cualquiera del resto de universidades que hay en Madrid. El siguiente destino es la Comunidad Valenciana, donde termina estudiando el 13 por ciento, Andalucía, que se lleva al 6,8 por ciento y Murcia un 2,4 por ciento.

La movilidad de los universitarios también es en sentido inverso. Castilla-La Mancha figura entre los cuatro destinos más elegidos para los estudiantes de dos comunidades. Es el primer destino fuera de Madrid para los madrileños, llevándose el 2,2 por ciento de sus universitarios. Es el cuarto destino para los extremeños, atrayendo al 1,5 por ciento de sus universitarios. 

Entran más Erasmus de los que salen

La llegada de un compañero nuevo en clase, el coronavirus, ha causado estragos en la movilidad internacional de los universitarios. Castilla-La Mancha fue una de las regiones que sufrió un mayor descenso en la presencia de estudiantes extranjeros en sus universidades en el curso 2020-21 en comparación con el anterior. Cayó entre un 40 y un 50 por ciento, unas cifras que solo fueron peores en La Rioja, pero que también padecieron las universidades de Extremadura, Asturias y Baleares. 

La presencia de estudiantes internacionales en Castilla-La Mancha no es muy elevada en comparación con otras comunidades. En el curso 2019-2020 (en el que vino la Covid) llegaba a alrededor del 5 por ciento de cuota del total del alumnado, sumando los que están en programas de movilidad como los Erasmus como los que tienen una matrícula ordinaria. Ese curso era la quinta comunidad con menos extranjeros, aunque tenían porcentajes más bajos Baleares, Canarias, Extremadura y La Rioja.

Un curso después, ya en plena pandemia, la presencia de alumnado internacional bajó al 3 por ciento. De nuevo Castilla-La Mancha está como la quinta región con menos estudiantes extranjeros. 

Los castellano-manchegos tampoco son de salir mucho al extranjero. El porcentaje de universitarios que participaron en programas de movilidad internacional no llegaba al 1 por ciento el último curso, compartiendo los últimos puestos con Baleares y Asturias. El impacto del coronavirus supuso un descenso entre el 55 y el 60 por ciento. 

Como son más los estudiantes internacionales que vienen a Castilla-La Mancha que los castellano-manchegos que se van al extranjero, al final el 'saldo' es positivo. Es una de las seis comunidades en las que ocurre esto junto con Cantabria, Andalucía, Comunidad Valenciana y Baleares.