Los vecinos del Casco histórico de la zona de la Diputación están que trinan. Molestos tras encontrarse con operarios de la empresa ‘Construcciones Antolín García Lozoya’, adjudicataria de la zanja única de la ciudad, levantando de nuevo parte de la calle Merced, reformada recientemente por el Consorcio, y tras introducir la zanja única.

La asociación vecinal ‘Iniciativa Ciudadana’ ha enviado una nota de prensa en la que denuncia las molestias para los vecinos y comerciantes, en materia de movilidad principalmente, la falta de planificación de las obras y que el Ayuntamiento de Toledo no informa a los afectados de las mismas. También alerta del gasto y cree que esta situación solo beneficia a la empresa  que ejecuta la actuación.

En su escrito, el colectivo indica que fue el viernes 14 de febrero cuando los operarios de la empresa Lozoya, concesionaria del Ayuntamiento para abrir zanjas en las vías públicas, comenzaron a descargar vallas y a colocar carteles que anunciaban el inicio de apertura de zanjas para el lunes siguiente (ayer).

‘Iniciativa Ciudadana’ censura que fueran los operarios de la empresa, y no la Concejalía de Obras, quienes informaron «de forma extraoficial a los vecinos de la zona que curiosos se acercaban y les preguntaban, que era una obra programada y aprobada por el Ayuntamiento desde hace meses, que se iniciaba el lunes 17 de febrero sin fecha concreta de finalización, y que consiste en abrir zanjas en el pavimento para introducir canalizaciones de gas desde la calle Merced hacia calle Tendillas».

Desde la entidad denuncian que el Consistorio repita ‘modus operandi’. «Como ocurrió en las recientes obras municipales en la zona Navarro Ledesma y plaza Amador de los Ríos, ni la Concejalía de Obras ni la de Movilidad han creído necesario e importante informar en tiempo y forma debidos a los vecinos residentes de la zona sobre estas obras programadas que afectan a su movilidad y calidad de vida».

La asociación añade que «es de esperar que el Ayuntamiento, en el ámbito de la seguridad y la accesibilidad tenga más consideración y empatía con los vecinos, no vuelva a caer en más viejos errores, y tome medidas para que los residentes tengan una entrada y salida segura y accesible a sus hogares, cosa que no ocurrió en las recientes obras de Navarro Ledesma».

‘Iniciativa Ciudadana’ recuerda que la parte de la calle de la Merced lindante con la plaza Capuchinas estuvo de 2018 a 2019 afectada por obras del Consorcio de Toledo, en las que se incluyó la reforma integral del pavimento, con la instalación de nuevas tuberías y de la zanja única. «Sin embargo, la empresa Lozoya vuelve a abrir zanjas en esta parte de la calle Merced porque la zanja única del Consorcio no incluyó la preinstalación de la canalización de ‘Gas Ciudad’», denuncia.  

La zanja ¿única? El colectivo sostiene que la zanja única es «una estafa» y que no es la primera vez que se produce esta situación. «Este reiterado gran error de planificación de obras del Consorcio y del Ayuntamiento de Toledo respecto a la zanja única, que provoca la apertura de nuevas zanjas, cicatrices en el pavimento, y nuevas molestias a los vecinos residentes, ya se repitió en las largas y conflictivas obras de reforma de la calle Bulas, donde el Consorcio y el Ayuntamiento no han sacado lecciones ni escarmentado».

La asociación va más allá y recuerda las recientes obras en Navarro Ledesma. «En las polémicas obras de reforma del firme en la zona de la calle Navarro Ledesma y plaza Amador de los Ríos, la errática Concejalía de Obras del Ayuntamiento directamente decidió no instalar la zanja única, a pesar del anunciado inicio de despliegue de la fibra óptica en el barrio».

La asociación recuerda que esta situación afecta a la calidad de vida de los residentes. «Es lamentable, tanto en el Consorcio como en el Ayuntamiento de Toledo el persistente error de planificación en la instalación de una zanja única incompleta en reformas de vías públicas del Casco, un error evitable que tanto perjudica la calidad de vida cotidiana de los vecinos residentes del barrio, y que tanto beneficia la empresa Lozoya».

Desde el colectivo critican la falta de información del área municipal de Obras. «Y no es menos lamentable la indolente falta de información de la Concejalía de Obras a los vecinos del barrio sobre intervenciones en las calles y plazas, que manifiesta un claro e insultante desprecio al derecho de información sobre asuntos públicos que tienen los ciudadanos residentes del Casco», concluye la entidad.