Los hosteleros adaptan horarios para hacer frente al calor

Lola Morán Fdez.
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El sector está viviendo una temporada, hasta la fecha, más floja de lo previsto por la falta de público desde el mediodía hasta última hora de la tarde, lo que ha llevado a muchos a cerrar durante ese tramo sin clientes

Muchos establecimientos hosteleros cierran al público durante las horas de más calor. - Foto: Reviejo

Los hosteleros afrontan este verano con una serie de condicionantes que les están llevando a incorporar cambios para poder abaratar costes. El calor está siendo el gran protagonista este año, con dos olas que han dejado en la ciudad temperaturas superiores a los 44 grados centígrados y que han llevado a la hostelería a adoptar medidas como cierres en las horas de más calor ante la falta de clientes. Así lo trasladaron a La Tribuna desde las asociaciones provincial y local de hostelería, desde donde confirmaron que a ello se suman las dificultades para encontrar trabajadores en este gremio.

Como expuso Valentín Moreno, representante de la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo de Toledo, por la mañana hay una actividad razonable, si bien cuando llega el mediodía, «se para» por las altas temperaturas que se han venido registrando hasta ahora, con olas de calor a consecuencia de las que ha habido un alto número de fallecidos. Algo que se traduce en que «la gente se quede en casa con el aire acondicionado», lo que repercute a su vez en la actividad hostelera.

«Las tardes están muertas», confirmó Moreno, quien explicó que, por este motivo, son muchos los que desde las 15:30 hasta las 20:00 horas aproximadamente «cierran» sus negocios. Una medida que, según dijo, están adoptando en torno al 85-90% de los locales ya que «te ahorras mano de obra, en cámaras en aire acondicionado, en luz, en gas, porque además no hay gente y la facturación es cero».

«Al final, nos estamos haciendo una piel camaleónica y nos estamos adaptando por momentos», manifestó el representante de la asociación provincial en relación a los hosteleros. Así, ahora se han adaptado al calor, que supone además «un problema añadido» porque, si hay clientes, es a partir de las diez de la noche, «porque antes es imposible». Eso, dado que las terrazas en verano «hay que cerrarlas pronto y que al día siguiente hay que trabajar», deja un margen de «una hora y media para hacer caja».

Al menos ha sido así hasta ahora, si bien ha sido algo mejor los días de menos calor, aunque ha sido «diferente» a la actividad que se registró el verano pasado, teniendo en cuenta en cualquier caso que en verano hay menos personas en Talavera por el periodo vacacional.

En esta misma línea se pronunció el vicepresidente de la Asociación de Hosteleros de Talavera, Domingo Martín, quien confirmó que está habiendo menos actividad de la prevista para estas fechas.

«Con este tiempo, la gente se resiste mucho a salir y cuando lo hace, lo hace muy tarde», mientras que las terrazas «tienen que recoger a unas horas que son prácticamente a las que sale la gente, sobre todo a diario». 

Si bien el fin de semana «sí que hay un poquito de público», a diario las jornadas son «muy tranquilas», máxime durante la reciente ola de calor, que se ha extendido durante más de diez días.

Por las mañanas se genera algo de movimiento ligado al comercio, si bien por la tarde ya se frena en seco la actividad. «De hecho hay muchos locales que están empezando a cerrar por las tardes, por el tiempo que se ahorra sobre todo en personal», y así «optimizar un poco los recursos de la facturación», expuso Martín.

«Antes un bar abría y cerraba prácticamente y ahora cada vez más locales han adoptado la dinámica de abrir y por la tarde cerrar un buen rato» por la falta de público en las horas de más calor. Ante esa bajada de la clientela y el incremento de los precios, muchos optan por abaratar costes con estos cierres en las horas más flojas del día.

Dificultad para encontrar camareros. Por otra parte, el sector se está enfrentando también este verano a la dificultad para encontrar camareros, según confirmaron desde ambas asociaciones de hostelería.

Valentín Moreno confirmó que este problema «añadido» es «generalizado» en el sector y al que no escapa Talavera, donde «está complicado encontrar camareros y cocineros». El motivo principal es el horario, «que no quieren trabajar los fines de semana», que es precisamente cuando más actividad hay en la hostelería.

«Fatal» es el calificativo que usó también el representante de la asociación talaverana para definir cómo está siendo la búsqueda de personal para estos meses de verano. «No se encuentran camareros, no hay gente cualificada para trabajar, no se exige tanto y las condiciones no son como antiguamente», expuso este hostelero. Así, confirmó que «la gente no quiere trabajar los fines de semana» y «buscan otra alternativa» a un sector que «está cambiando de manera agigantada».