Comarcalidad, sin perder la identidad de los pueblos

Mario Gómez
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Desde la Asociación Cultural Montes de Toledo pretenden divulgar las bondades de la comarca desde un enfoque colectivo, ya que reconocen que «la unión hace la fuerza»

Ventura Leblic es el presidente de la Asociación Cultural Montes de Toledo. - Foto: David Pérez

El mero hecho de acudir a la sede de la Asociación Cultural Montes de Toledo, ya es una introspección al pasado. Ascender al interior de la Puerta del Cambrón es, en parte, recorrer los siglos que nos separan de aquella puerta de fundación muy antigua al parecer de origen visigodo, un hecho muy significativo pues forman parte de la «riqueza patrimonial, artística y monumental de la comarca».

Hoy en día conserva parte de la estructura de época musulmana con un aspecto exterior de estilo renacentista, fruto de las remodelaciones acometidas en el S.XVI. En estas obras participaron los maestros Hernán González, Diego de Velasco o? Juan Bautista Monegro. Pues con este preámbulo, no puede ser de otra forma que dejarnos empapar de la historia de la comarca de los Montes de Toledo, que es la base de esta Asociación.

Se trata de una entidad sin ánimo de lucro, nacida en 1977, que tiene como finalidad «promover la solidaridad entre 35 pueblos de la comarca natural de los Montes de Toledo a partir del hecho identificativo de su cultura», tal y como explica su presidente Ventura Leblic para La Tribuna.

Esta finalidad se plasma mediante las múltiples actividades que organizan. Principalmente se centran entorno al patrimonio, su investigación, divulgación, protección y recuperación, «que siempre es lo más complicado». De este modo, explica Leblic, se permite conocer la historia que ha precedido a la comarca, ya que «está todo inventado», explica entre risas, puesto que los asuntos de confrontación entre diferentes administraciones o las demandas de los ciudadanos de hoy en día.

Es aquí cuando menciona las 'llegas'. Una reunión propia de los municipios monteños y en las que los dirigentes o cargos más representativos de las comunidades, se hacían presentes y ponían en común las necesidades de sus territorios. Era ahí donde «se lograban las reivindicaciones y las mejoras», puesto que según el presidente, son muchos las zonas que estaban sometidas a la influencia de Toledo, que en ocasiones «abusaba de los asentamientos o pueblos de los Montes y mediante las llegas era la forma de alcanzar acuerdos».

Estas reuniones permitían para organizarse en intereses comunes, como arreglos de caminos, en defensa de sus derechos y de la propiedad de las tierras en las que vivían y trabajaban o para actualizar ordenanzas, siendo reconocido por los historiadores como «un ejemplo del parlamentarismo rural» que se mantuvo durante siete siglos.

Ahora ya como recuerdo se celebran en algunos pueblos a modo festivo, pero Leblic insiste en reivindicar «la fuerza de la unidad que heredaron de sus antecesores como una de sus señas de identidad para seguir avanzando en su desarrollo», por lo que enfatiza en la necesidades de seguir celebrando 'llegas', para recordar que a base de esfuerzo y unidad ya se han conseguido muchas cosas.

Dentro de sus actividades divulgativas, está de plena actualidad la rehabilitación del yacimiento de Malamoneda en Hontanar. Un enclave estratégico de paso para los pueblos, situado en el valle del río Cedena, al pie de la Sierra del Puerco, y que debido a las fronteras naturales de los ríos y las montañas hicieron este enclave como necesario para ser punto de control, encontrándose compuesto fundamentalmente de un hábitat, una necrópolis y estructuras militares correspondientes a distintas etapas (hispanorromanas, visigoda, musulmana, alto y bajo medievales cristianas), así como un despoblado desde finales del S. XVI hasta el S. XX. 

Dentro de este conocimiento, Leblic se muestra ilusionado con la proliferación de Centros de Interpretación. Algo que supone una apuesta clara y decidida por parte de la Asociación y que manifiestan allá cuando pueden a Ayuntamientos y entidades de gobierno. Según explica, los Centros de Interpretación son más dinámicos y económicos de crear y mantener que los museos al uso. Además de requerir menor infraestructura, el concepto que los define, hace que puedan ser más fácilmente asumibles.

Por ello desde la Asociación invitan a conocer «nuestra historia, tradiciones y antepasados», recuperando las señas de identidad como territorio, y «conseguir que el concepto de lo mío cambie por lo nuestro».

PRODUCCIÓN LITERARIA. Para dar a conocer su obra, la Asociación realiza diferentes publicaciones periódicas. A la 'Revista estudios monteños', santo y seña de la Asociación y con más de 175 números publicados, hay que añadir 'El monteño', además de cientos de publicaciones monográficas sobre temas de interés general relacionados con arqueología, geología, antropología, literatura, patrimonio, naturaleza, historia o las diferentes rutas documentadas por la entidad.