La obra que completa al Greco

Jaime Galán
-

'La Crucifixión' fue presentada en sociedad en el Museo del Greco. Es la primera obra del pintor que ingresa en la galería desde que se fundó en 1910

'La Crucifixión' en el Museo del Greco - Foto: Yolanda Lancha

Se puede decir que siempre hay una primera vez para todo. Y para todos. Incluido el Museo del Greco, porque su directora y varios representantes de otras instituciones presentaban una sonrisa de oreja a oreja al enseñar una obra más en esta galería. Y no es una cualquiera. Significa la primera obra firmada por Doménikos Theotokópoulos, más conocido como 'El Greco', que ingresa en este museo desde su fundación en el año 1910. Se trata de 'La Crucifixión', una obra que con su llegada a este centro completa una etapa más en el relato histórico de la vida del pintor.

Así lo explicaron los presentes en esta cita de bienvenida, porque supone una obra que data del período intermedio entre los comienzos del Greco, cuando tenía una mayor influencia griega en sus obras, y su posterior explosión artística hacia un estilo muy marcado y diferenciable de los demás artistas de la época. Así lo transmitió Isaac Sastre, director general de Bellas Artes del Ministerio de Cultura. Vinculó esta obra a ese período intermedio que coincidió con la formación del Greco por Italia, y sobre todo en Venecia y Roma. Además, 'La Crucifixión' está expuesta en la galería junto a otra obra del cretense de las mismas características, pero de la que se aprecian diferentes matices. Sastre explicó que en esta obra ya se aprecian «tonos más impresionistas, con grises plomizos, e incluso con detalles de otro genio como Miguel Ángel en los torsos de las figuras. Viene a representar el cambio en lo que posteriormente será una característica común en él, el alargamiento de las figuras humanas en sus retratos».

La obra se recuperó por un valor de un millón y medio de euros, gracias a la labor de la Junta de Calificación y Exportación del Ministerio de Cultura, según detalló el director general. Aunque la obra ya estaba en Toledo, pertenecía a una propiedad privada, y antes de proceder a su subasta fue ofrecida al Ministerio porque tenía un derecho de tanteo por la misma. 

Ahora, la obra se asentará en el Museo del Greco, dónde su directora Carmen Álvarez no pudo mostrarse más feliz: «Se trata de una pieza de valor incalculable que completa una laguna o carencia en el discurso de las etapas del pintor». Álvarez también destacó que la llegada de la obra convierte a la galería que dirige en «el gran museo nacional del artista cretense».

Orgullosa también se mostró la alcaldesa, Milagros Tolón, porque afirmó que El Greco es un referente cultural, y esto «fortalecerá aún más su vínculo con Toledo y atraerá nuevos visitantes apasionados por la cultura».