Los rostros de muchos de los espectadores de La Nocturna cambiaron cuando presenciaron el paro cardíaco que sufrió uno de los corredores durante el recorrido. El joven de 17 años sufrió lo que se conoce como muerte súbita practicando deporte. Por suerte, la presencia de especialistas en la carrera y de desfibriladores con los que contaba Protección Civil le salvaron la vida, de ahí que la muerte súbita se llame «reanimada», porque sin esa intervención el final habría sido trágico como indica el propio nombre del incidente.
Según los expertos, los episodios de muerte súbita en el deporte tienen dos causas de alta probabilidad. La primera de ellas son las miocardiopatías, es decir, patologías del corazón que el paciente desconoce que las tiene. La más común es la miocardiopatía hipertrófica, que es «un engrosamiento patológico de las partes del corazón que hace que se vuelvan más gruesas y se generen arritmias», según explica Alejandro Berenguel, cardiólogo del HM IMI Toledo. Esta es la que se ajusta al corredor de la Nocturna porque es la más común en personas menores de 35 años. La otra posibilidad es que la muerte súbita sea provocada por un infarto, algo que ya es más frecuente en las personas mayores de 35 años.
Para los especialistas como Berenguel, estas situaciones son «muy abruptas porque las sufren gente joven que aparentemente está sana», pero «tienen gran facilidad para prevenirse». Este explica que bastaría con someterse a revisiones básicas con el médico de cabecera «si has dado el paso de practicar deporte de alta intensidad o con frecuencia diaria» y destaca que no sería necesario «al apuntar a un niño al fútbol». Añade que solo se debe ir al cardiólogo si en esas revisiones se denota algo raro o si el deporte es de «altísima intensidad».
Alejandro Berenguel, cardiólogo del HM IMI Toledo - Foto: Carlos Hormigos CH PhotographyPara Alejandro Berenguel es importante destacar que no hay que alarmar a la población, porque «es muy poco frecuente; de dos millones de personas en España que practican running, ciclismo o fútbol se producen 200 muertes súbitas al año». A lo que añadió que de esta cifra «se podrían evitar entre 170 o 180 con simples revisiones, porque en ellas se descartan el 90 por ciento de las causas que originan las muertes súbitas».
La premisa es clara, no alarmarse ante una situación poco frecuente, pero si practica deporte de intensidad, no cuesta nada hacerse una revisión.