No fue el estreno soñado, pero sí la evidencia de que el trabajo, aunque sea en dos días, se plasmó en el juego a pesar de perder frente a la UD Alzira. Para el técnico del CD Toledo, Javi Sánchez, el resultado también pone de manifiesto que «venimos de una dinámica negativa». Y es que, como expuso, «el rival marcó en sus dos primeros tiros, y uno de ellos ni siquiera iba a portería».

En cualquier caso, el toledano se marchó a casa con «muchas cosas positivas», y con la sensación de que los errores que se cometieron «son mejorables». A pesar del 0-2 adverso que se encajó en la primera mitad, el cuadro verde consiguió reponerse para cuajar una segunda mitad que alienta a la esperanza: «Se ha demostrado con muchas ocasiones, con llegadas y con balones a los palos; la pelota a veces no quiere entrar». Seguidamente, recordó que la UD Alzira acabó «sufriendo y metiendo más jugadores en su área para defenderse», aun corriendo el riesgo el CD Toledo de encajar un tercer tanto fatal.

Para él, no es cuestión de puntería, sino de eficacia, ya que, según dijo, «generamos suficientes oportunidades, pero debimos haber hecho el gol antes». Por eso, es momento de «seguir trabajando, perfeccionando cosas y corrigiendo detalles». No en vano, considera que «en dos días, hemos cambiado todo lo que hemos podido».

A nivel anínimo, Javi Sánchez traladó que la plantilla estaba bastante tocada después de encajar una nueva derrota. Sin embargo, según comentó, en el vestuario les dijo que cree en ellos y que está convencido de poder sacarlo adelante, sin la intención de regalarles los oídos. «Hay que levantarse como sea; confío en la calidad que hay en el equipo».

Asimismo, el técnico toledano valoró positivamente la actitud del público, que vio todo eso positivo extraído del encuentro y «nos aplaudió a pesar de que volvimos a perder». Es una de las muestras de que la afición también está con el equipo, según Javi Sánchez.

Por lo demás, el técnico verde espera recuperar esta semana a Mamau, que se encuentra con unas molestias físicas. A quien todavía le queda un tiempo es a Adrián, después de una recaída por la que «hay que tener mucha prudencia». El resto parece que están bien, y a quien también se tendrá disponible de cara al partido siguiente es a Chele, tras cumplir sanción.