Lo primero que hizo Javi Sánchez después de perder frente al Atlético Pulpileño es pedir perdón. El técnico del CD Toledo entiende el enfado de los aficionados y lo único que promete es «seguir trabajando para encontrar soluciones». Y es que, «ya no podemos pedir que crean en nosotros; solamente continuaremos con el trabajo para ganarnos la credibilidad a base de resultados», sentenció.

Además, la derrota fue «un palo enorme», y considera que las expulsiones les perjudicaron, más que beneficiarles. «Estar en superioridad hace que parezca más fácil, y nos pudo la ansiedad y la precipitación», explicó. Y es que, el toledano reconoce que «no salió nada». Por eso, este nuevo tropiezo dejó al vestuario «hundido».

Javi Sánchez analizó que, once contra once, lo estaban llevando bien, y que, incluso, evitaron el intercambio de golpes que quizás pretendía el rival. Lo que no llega a entender es que la jugada del 0-1, ya que «no es un contragolpe, en el que nos hubieran pillado, sino una acción en la que nos encontramos bien posicionados».

Por lo demás, en cuanto al juego de ataque, el preparador verde admite que hay «falta de claridad» en el área contraria, además de «no estar acertados en los pases». ¿El problema? Su respuesta es contundente: «Todo es falta de confianza, pero no tengo la solución encima de la mesa». Por eso, piensa en levantar el ánimo de los jugadores y preparar el siguiente partido: «Todavía queda mucho, y esto se cambia con un resultado positivo y buenas sensaciones; es necesario hilar fino».

Tampoco está logrando el CD Toledo que el balón parado se convierta en un arma peligrosa, en una categoría como esta. «Intentamos buscar lo adecuado para las características que tenemos, porque no somos un equipo poderoso», reconoce Javi Sánchez, quien asegura que, al menos un día a la semana se incide en este aspecto del juego: «No está costando, pero hay que automatizar una serie de movimientos».

En cuanto a los lesionados, Sánchez desveló la lesión muscular de Migue García que le impidió participar frente al Atlético Pulpileño, aunque es muy probable que pueda reaparecer el domingo (12:00 horas) en la Ciudad Deportiva de Buñol frente al Atlético Levante. También se espera a César Ortiz, que estaba bastante bien, pero por precaución se le reservó. Por lo demás, Adrián seguirá sin poder participar.