Miguel Ángel Collado

Alma Mater

Miguel Ángel Collado


La conquista de la Transición

16/05/2022

Óscar Alzaga, destacado personaje de la oposición democrática al franquismo, ha publicado un libro en el que, con el título 'La conquista de la transición (1960-1978). Memorias documentadas', da su versión de la confluencia de procesos que a lo largo de esas dos décadas dio lugar a la Transición. No es una historia global. Cuenta lo que ha vivido y cómo lo ha visto él. Y como jurista, como abogado, sabe que hay que probar lo que se afirma, por eso todo el aparato documental que aporta para sustentar su relato. Ha sido una minuciosa actividad que le ha llevado 12 años de búsqueda y recopilación de documentación para lo que ha accedido a multitud de archivos públicos y  privados pues el libro comienza exponiendo el proceso de destrucción por parte del gobierno, en los comienzos de la transición, de documentos de muchos archivos (ministerios, organización sindical…) aunque que se salvaron otros como los de los tribunales y del ejército que proporcionan información relevante; así mismo ha acudido a la prensa extranjera de la época, que daba claves de lo que estaba sucediendo en esos dos lustros.
La idea central de estas Memorias es que la transición es un hecho colectivo como resultado de la convergencia de diversos ejes. El primero es el protagonismo del movimiento universitario. Es un eje fundamental. Franco era consciente de la importancia que tenía la protesta estudiantil. Se lo subraya el ministro Garicano en 1972 en un informe. El primer estado de excepción (en todas las universidades) es por el movimiento estudiantil en 1969. Es un factor clave porque se produce una brecha generacional, los jóvenes querían vivir en unas democracias como las europeas, estaban convencidos de la necesidad de entrar en la Comunidad Económica Europea de ese tiempo. Pero no es solamente que se había creado un corte generacional, además el movimiento estudiantil se extendía capilarmente en cuanto que penetró en las clases medias generalizándose en la sociedad. El régimen no sabía cómo hacer frente a ese proceso. Se estaba erosionando internamente.
Junto al movimiento estudiantil, Alzaga subraya el papel de la presión externa, de los países de la CEE, de instituciones supranacionales y de la Iglesia. Aporta documentos de la Asamblea del Consejo de Europa y otros organismos en los que se formulaban los requisitos que se exigen al régimen para incorporarse a las Instituciones europeas. Son documentos en los que se pone de relieve el largo camino que todavía tenía que recorrer nuestro país para aspirar a lograrlo, mientras el régimen quería dar la impresión pública de que cada vez estábamos más cerca de nuestra entrada en Europa. En esta presión externa también juega un papel muy destacado la Iglesia Católica. El Papa adopta la táctica de cambiar la cúpula de la Iglesia que se va distanciando del franquismo.
El autor da su versión sobre el papel de la Democracia Cristiana en la conquista de la transición y su interpretación de las razones de por qué es un proyecto que no triunfa después. Dos de las causas fundamentales serían la falta de liderazgo de Ruiz Jiménez, frente a la solidez anterior de Giménez Fernández, así como la posición de la propia Iglesia que no quería el modelo italiano. Pero podemos preguntarnos si hay otras explicaciones para que no haya tenido éxito como fuerza política la Democracia Cristiana en España, como tampoco en Francia, a diferencia de Italia o Alemania. En el período de entreguerras ni en España ni en Francia la Democracia Cristiana tuvo la importancia que sí ha tenido en los otros dos países y que todavía conserva en Alemania.