El orden de los factores no altera el producto. Se adelantó o no, el CD Toledo está destinado esta temporada a acabar baldado cada partido. A base de palos ha descendido, y, ya con todo visto para sentencia, recibió otro ante el Hércules CF, al que pudo haber ganado,y bien. Pero llegó el empate en el descuento. Como siempre. Ya no da ni rabia.
Sin ambiente de buen partido, las primeras posesiones fueron para el conjunto visitante, alentado por su gente, a la única que se la oía. En el minuto 9, Borja Galán intentó marcar el primero en la salida de un córner, pero Roberto se fue abajo a coger la pelota. El CD Toledo simplemente se dejó ver por el área de Adri López en una salida rápida de Cédric que acabó como siempre: en nada. El delantero abusó del control y no se la pasó a un compañero, que entraba por el otro lado.
Pero fue más clara una acción posterior de Kike Pina por la izquierda. El albaceteño puso el centro desde el costado izquierdo y el propio Cédric remató muy forzado de cabeza. El portero la despejó a córner de mala manera. La réplica herculana tardó en llegar. Superado ya el cuarto de hora. Después de un saque de esquina, Diego Jiménez remató solo de cabeza delante de todos, pero con la dirección equivocada.
Al CD Toledo siempre le sale cruz (1-1) - Foto: David PérezNo faltó intensidad. Quizás más por parte del Hércules CF, pero ya se ha visto este año muchas veces que no solo es cuestión de ponerle actitud, también fútbol, sobre todo en ataque, y ahí el conjunto verde suele patinar. La manija era para los de Sergio Mora, con los locales enfrente esperando un error y sin arriesgar desde atrás.
En uno de esos balones largos, Cédric intentó de nuevo la jugada individual, pero el balón le cayó a Rodri, aunque su disparo lo interceptó un defensor. Es complicado contar un encuentro que no sirve para nada, al menos para el CD Toledo. Y ni la afición hercalana tuvo la continuidad que se le pedía con lo que tenía en juego.
Su equipo comenzó a despertar en el epílogo de la primera parte, con varias llegadas peligrosas. Esa es la diferencia. Los rivales cuando le llegan, le hacen más daño al equipo de Javi Sánchez. Así todo el curso. Pau Miguélez, en el minuto 39, no marcó el primero de milagro. Recibió un centro desde el costado derecho y remató solo dentro del área. Lo hizo fuera. El árbitro no descontó ni un segundo. Bien que hizo.
Al CD Toledo siempre le sale cruz (1-1) - Foto: David PérezEse ritmo cansino del primer acto, cambió radicalmente en el segundo. No se habían cumplido ni tres minutos cuando Alberto puso un centro al área que sorprendió a todos con un cabezazo de Kike Pina que acabó en las mallas. El Hércules no se quedó atrás, y replicó inmediatamente con otro testarazo que se topó con el larguero.
Lo cierto es que el partido estaba más para el 2-0 que para el 1-1. Y Andriu llegó a conseguirlo, en el minuto 61, pero el árbitro dijo que estaba en fuera de juego en el momento del pase de Jesús Cambil.
Javi Sánchez sacó a Migue García por Kike Pina para afrontar la última media hora. El andaluz probó suerte pronto con un zurdazo que detuvo el guardameta. El Hércules CF tenía que dar un paso adelante. Y lo hizo. Eso le vino de perlas a los verdes, que estaban por delante en el marcador y muy cómodos al contragolpe. Cédric se vio con pasillo por delante en un robo, pero decidió mal. Tiró desde lejos para desaprovechar la ocasión.
De nuevo con espacio por delante, ya en el minuto 80, Gomis condujo la pelota y esperó un pase preciso para Migue García, cuyo disparo detuvo Adri López. La asignatura pendiente de todo el curso. Y es que, la desesperación cundió con otra salida rápida de Cédric, que se fue de un defensa, aunque luego el disparo se lo paró el guardameta. El rebote le vino a Migue García, que se entretuvo en exceso.
Qué bonito estaba el partido. De ida y vuelta. El CD Toledo estaba descuidando su defensa, pero qué más daba. Era el último partido de la campaña en el Salto del Caballo y había que ganarlo como fuera. Quizás por eso, el técnico toledano dio frescura al ataque con Pepe Carmona y Rubén Moreno. Apenas quedaban tres minutos de tiempo reglamentario más el descuento, pero merecía la pena intentarlo.
El cuadro alicantino no tenía tampoco argumentos para marcar, pero sí para generar peligro. Le faltaba enganchar algún balón de los que estaba metiendo en el área. Y lo hizo. Se veía venir. La tónica de esta maldita temporada. Tras una mala salida de Roberto, el balón le quedó muerto a Diego Jiménez, que solamente tuvo que empujarlo. El empate frenó al Hércules, que le valía para certificar su presencia en los 'playoff' de ascenso. Desde el banquillo insistieron en que no pugnaran por la última falta del partido. Esto fue todo. Le vale con ganar al Marchamalo en la última jornada para certificar la tercera posición. El Toledo viajará a Murcia a por las vacaciones.