Carlos Calzada

Carlos Calzada


Parón sin pausa ni parada

18/11/2022

El CD Toledo no está para desconectar. Ni para vacaciones, ni descansos. Y sí para tratar de aprovechar estos respiros competitivos trabajando a conciencia en afianzar el modelo de juego y las variantes del ya no tan nuevo entrenador.
La mejora en el juego y en las sensaciones es evidente jornada a jornada, pero, a la vez, es totalmente insuficiente para lograr resultados positivos que sumen puntos en el casillero de tres en tres, que primero saquen al equipo del descenso, y después lo vayan llevando a una situación ojalá más elevada en la tabla clasificatoria. A favor está la igualdad y competitividad del grupo. En contra, que los equipos con la vitola de favoritos, y que no arrancaron tan bien, ya están en puestos de 'playoff 'de ascenso, y con el golaveraje a su favor, de momento.
La única parada permitida estos días debería haber sido para que se sumen al equipo nuevas incorporaciones que aporten ese plus competitivo que se traduzca en victorias, a la vez que contagien al resto de futbolistas y mantengan viva esa ilusión de una afición fiel que nunca ha dejado de apoyar a su equipo en el Salto del Caballo y en todos sus desplazamientos.
Incorporaciones realmente vitales después del periodo necesario y solicitado por el entrenador para implantar su modelo de juego. La clave, sin duda en estos momentos, no es el juego, y sí los puntos, ganar como sea. Y si algo ha quedado claro en este primer tercio de temporada es que para que lleguen esas victorias es imprescindible que lleguen más incorporaciones que ayuden a dar un salto de calidad en todas las líneas. Cierto es que, no debe ser fácil a estas alturas de la temporada encontrar jugadores válidos, en forma, con las cualidades adecuadas para lo que se pretende y necesita, e interesados en venir a un equipo que siembra grandes dudas en lo deportivo, más aún con la reciente salida de su secretario técnico y las dudas entorno a la dirección deportiva.
Queda claro que el CD Toledo no está para parar y sí para seguir en busca de un cambio real de dinámica total (juego y resultados), para intentar llegar, paso a paso, a cumplir el tan ansiado objetivo del ascenso de categoría. Quizás por esto, ha sido el equipo que más ha entrenado durante este parón, pero como todos pudimos comprobar en pretemporada, no siempre más es mejor.
Es, por tanto, un punto de inflexión en la temporada, con tiempo para trabajar y con un calendario cuyo mayor error puede ser acometerlo como si de rivales asequibles se tratara. Cada partido debe ser una final, y aprovechar el factor campo con tres de los próximos cuatro partidos como local.
No me puedo olvidar que el club se encuentra en uno de los mejores momentos a nivel institucional que recuerdo, y que eso vaya de la mano de éxitos deportivos es clave para la continuidad de un proyecto ilusionante que lleve al equipo y la ciudad a una categoría y estabilidad más que merecidas.