Las obras de La Milagrosa darán comienzo en noviembre

Lola Morán Fdez.
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A través de esta actuación, adjudicada a Iniciativas RFE por cerca de 771.000 euros, el Ayuntamiento de Talavera rehabilitará el edificio para convertirlo en un centro cívico

La antigua clínica de La Milagrosa se convertirá en un centro cívico. - Foto: Manu Reino

Las obras de rehabilitación del antiguo hospital La Milagrosa para su conversión en centro cívico arrancarán en la primera quincena de noviembre. Así lo avanzó a La Tribuna el concejal de Contrataciones y Seguimiento de las Concesiones, Luis Enrique Hidalgo, quien precisó que en estos momentos se están llevando a cabo labores previas a los trabajos en este inmueble situado en el Paseo de la Estación.

A través de este proyecto, enmarcado en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (EDUSI) y cofinanciado en un 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional FEDER, se dotará a este barrio talaverano de un nuevo punto de encuentro social y cultural. Se hará en este inmueble de propiedad municipal, de 670 metros cuadrados y al que se sumará un nuevo espacio verde en el jardín de 750 metros cuadrados que estará abierto a la ciudadanía.

El proyecto redactado por el arquitecto Jesús Peco López apuesta por conservar los valores patrimoniales e históricos de este edificio. De hecho, la construcción está incluida en el Catálogo de Bienes y Espacios Protegidos del Plan de Ordenación de Talavera, con Grado E, correspondiente a la fachada y al volumen.

La construcción del inmueble data de 1891, tal y como refleja la puerta principal de este inmueble que, en su origen, fue concebido como una vivienda unifamiliar a las afueras de la ciudad,  que contaba con un huerto en su parte trasera que posteriormente se convirtió en el jardín actual.

Según el Catálogo de Bienes y Espacios Protegidos del Plan de Ordenación de Talavera, en 1934, el poeta talaverano Ernesto López Parra narra cómo «el chalet de los jazmines» llamó la atención del pintor Zuloaga en su visita a la ciudad, debido a la exuberancia de estas flores en los jardines del edificio. Asimismo, se indica que la construcción cambió de uso a Clínica u Hospital, realizándose un proyecto de ampliación y adaptación en 1969, fecha en la cual se añadió el cuerpo posterior que podemos ver actualmente, tal y como recoge el proyecto arquitectónico.

En él se especifica también que, a día de hoy, el edificio representa uno de las pocas muestras relevantes de la arquitectura de finales del siglo XIX. 

Estado actual. El edificio de la Milagrosa, distribuido en tres plantas, no tiene ninguna instalación funcional en la actualidad y presenta un estado de abandono evidente por la falta de uso, de mantenimiento y actos vandálicos.

A lo largo de los años se han ido realizando pequeñas reparaciones, «con poco respeto hacia la construcción original», según recoge el proyecto. En él se especifica también que uno de los puntos críticos del edificio es la cubierta, donde se intervino en 2018 para evitar las filtraciones que existían, «pero no se solucionó el problema estructural de la misma». De hecho, a día de hoy, parte de la planta superior se encuentra apuntalada.

En lo que respecta al patio, está plagado de hierbas y plantas de temporada que crecen de manera espontánea y que sirven de refugio para una colonia de gatos que vive en la parcela.

Intervención. La rehabilitación integral del inmueble correrá a cargo de la empresa talaverana Iniciativas RFE, adjudicataria del contrato con una oferta de 770.974,05 euros, IVAincluido, partiendo de un presupuesto base de 975.916,51 euros.

Contará con un plazo de siete meses a contar desde el inicio de la obra para rehabilitar este inmueble conservando sus valores patrimoniales e históricos. Así, se integrarán todos los elementos en la actuación, por su buen estado de conservación y su compatibilidad con el uso previsto.

En la fachada se hará una limpieza general y se restituirán o reconstruirán las piezas más dañadas. De otro lado, se sustituirá la cubierta del edificio por una cercha de madera, lo que permitirá la eliminación de los muros de la planta superior, consiguiendo un espacio completamente diáfano que permitirá su uso de manera multifuncional, pudiendo adaptarse a exposiciones, conferencias o talleres. 

El nuevo centro cívico contará con esta sala multiusos además de una zona de aseos y otra de despachos y salas de reunión en planta baja.

El sótano se destinará a la ubicación de un almacén y de los cuartos de instalaciones que requiere el nuevo uso, entre ellas un ascensor para cumplir con los requisitos de accesibilidad.