La empresa concesionaria del transporte urbano ha pedido al Ayuntamiento de Toledo 367.913 euros como compensación por daños sufridos a consecuencia de los efectos de la Covid (en cuanto a  absentismo laboral, costes fijos de explotación, servicios gratuitos prestados e ingresos por publicidad no percibidos). Tras diversas reflexiones de sus funcionarios y corregir algunos puntos de vista el Gobierno municipal ha aceptado pagar a Unauto solo los 2.491 euros que ha documentado por el aumento del absentismo laboral debido al virus.

Unauto SL presentó alegaciones contra el acuerdo de la liquidación anual del ejercicio 2020 por discrepancias con el informe emitido por la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Toledo. Aunque le aprobaron una subvención de 1.084.991 euros, la empresa de transporte reclama que le reconozcan una merma de 106.852 euros por los costes fijos de explotación, otros 55.615 euros en compensación por los ingresos no percibidos por publicidad y 202.954 euros correspondientes a servicios gratuitos prestados.

El Ayuntamiento rechaza sin discusión las alegaciones relacionadas con costes fijos de explotación y servicios gratuitos (por importe de 106.852 euros y 202.954 respectivamente) al considerarlas «improcedentes conforme al contrato y a las subvenciones extraordinarias concedidas debido a la Pandemia».

Sin embargo hay discrepancias en la alegación por los ingresos de publicidad dejados de percibir (55.615 euros) ya que el Gabinete de Estudios Económico-Financieros del Ayuntamiento emite un informe que avala las aspiraciones de Unauto mientas que la Secretaría General (que a la postre impone su tesis) es contraria.

El informe jurídico de la Secretaría afirma que los ingresos por publicidad «son a riesgo y ventura» de la concesionaria también durante la situación generada por la COVID-19, «de modo que no deben ser objeto de compensación» aquellos que se hayan dejado de percibir.

Argumenta que el Pliego que rige el contrato «señala con toda claridad que los ingresos de todo tipo que obtenga el concesionario por la gestión de los autobuses urbanos lo serán a riesgo y ventura del mismo, salvo en los casos de fuerza mayor».

Por lo tanto la clave es aclarar el concepto de fuerza mayor y se remite a la Abogacía del Estado que en sus documentos de calificación indica que las consecuencias del COVID-19 no constituye causa de fuerza mayor ya que el Real Decreto de medidas urgentes extraordinarias para hacer frente al impacto económico y social de la enfermedad no lo prevé como tal y declara inaplicables para estos casos los artículos de la legislación de contratos sobre reequilibrio de concesiones para renegociar los contratos.

A Unauto le queda el consuelo de que le aprueban un pago de 2.491 euros como complemento a la liquidación anual del contrato de gestión del servicio de transporte urbano de viajeros correspondiente al ejercicio 2020 tras la aceptación parcial de sus alegaciones.