Las cifras sobre asuntos de cláusulas abusivas hipotecarias continúan alumbrando un panorama llamativo en los juzgados a pesar de que el aluvión de demandas que suelen presentarse al año son bastante más moderadas que en 2018 o 2019. 

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha publicado recientemente su último balance y ha comprobado que el plan de refuerzo de especialización de los juzgados funciona porque los tribunales españoles ya han resuelto el 70,3% de los asuntos desde que comenzaron a entrar con el plan en 2017 y los resultados arrojan un 98% de sentencias a favor de los clientes. 

Los porcentajes ayudan a dibujar la actividad que se está llevando a cabo en los juzgados, pero también dejan claro que siguen entrando muchas demandas y quizá sea necesario que el Ministerio de Justicia y el CGPJ acuerden continuar con el plan de especialización en cláusulas abusivas medio año más a partir de junio, siempre que lo determine la Sala de Gobierno correspondiente, previa audiencia de la Junta de Jueces de Primera Instancia.

Respecto a Toledo, la estadística indica que estos asuntos crecieron un 12,5% en 2021 respecto a 2020. En concreto, el juzgado número 8 de Toledo, que está exento de su  materia civil hasta junio porque permanece como órgano especializado en cláusulas suelo temporalmente, registró 1.892 demandas el año pasado, 211 más que las recabadas en este órgano y en juzgado número 1 en 2020. 

Además, en el primer trimestre de 2021 los casos se dispararon un 117% respecto al mismo periodo del año anterior. Toledo mantiene la tónica general si se compara con los datos nacionales, que contabilizaron un 5% más de entrada de esta clase de demandas el año pasado.

Y a pesar de que las cifras son más moderadas que en 2019, año en el que se contabilizaron 2.529 asuntos, todo indica que aún es pronto para apearse del plan de refuerzo en Toledo, que mantienen otros 24 juzgados españoles, aunque en teoría uno de los requisitos para la prórroga sean las 2.000 demandas por juzgado como mínimo, un número que no se llegó a alcanzar a finales del año pasado y aún así Toledo consiguió mantenerse dentro de este plan de refuerzo que caducará en junio.

De momento, se desconoce si el juzgado número 8 de la capital, que se estrenó en octubre de 2020 y asumió esta materia junto con el juzgado número 1 bis de Toledo, que engloba las cláusulas suelo, el vencimiento anticipado, los intereses moratorios y los gastos de formalización de la hipoteca, podrán beneficiarse de la medida de nuevo.

Sin embargo, todo apunta a esta posibilidad si además se tiene en cuenta que a finales de 2021 todavía quedaban en trámite 1.764 demandas, una cifra muy significativa que refleja la importante sobrecarga de trabajo a pesar de que la actividad haya vuelto prácticamente a niveles de 2019 tras el bloqueo y los retrasos ocasionados en 2020 a causa de la pandemia y la paralización de la materia judicial salvo casos urgentes durante los más de dos meses de confinamiento domiciliario.

Datos de lo Social. Los operadores jurídicos llevan tiempo pendiente de la situación económica, de su repercusión laboral y de la sobrecarga de trabajo que se sufre en la actualidad en esta jurisdicción. A pesar de que en octubre pasado entró en marcha el cuarto juzgado de lo Social en Toledo, que está ayudando a rebajar la saturación permanente de los otros tres órganos, uno de ellos encargado de esta materia en el partido judicial de Talavera de la Reina, lo cierto es que la cantidad de asuntos practicamente no baja.

Además, las amenazas de una fuerte crisis económica dibujan un panorama complicado que puede llevar a llamativos retrasos en los señalamientos y aumentar la pendencia. En este caso, del balance anual del CGPJ se desprende que el año pasado entraron en los juzgados toledanos 1.269 demandas de despido, un 4,1% menos que en 2020, el número sigue siendo alto y los operadores jurídicos temen que la finalización de los ERTE, la delicada situación económica y el aumento del gasto derivado de la guerra de Ucrania disparen la destrucción de puestos de trabajo, una situación que complicaría la actividad en los juzgados.

Asimismo, el boletín anual del CGPJ recoge un total de 1.191 reclamaciones de cantidad ingresadas en los juzgados de Toledo en 2021, 71 más que el año anterior. También el juzgado de lo Mercantil y el bis actúan como termómetro que mide la situación económica. En este caso, ingresaron 197 concursos, un 43,7% más que en 2020. Las previsiones que pueden manejarse es que este tipo de asuntos, con una tramitación compleja, aumenten a lo largo de este año.