La Guardia Civil ha confirmado a este diario la muerte de un ejemplar de lince por atropello en el término municipal de Menasalbas.

El animal ha aparecido hoy a las 9:41 horas a la altura del kilómetro 25, en la carretera CM-410. Una patrulla del Seprona ha ratificado que se trataba de un ejemplar de esta especie reintroducida en los Montes de Toledo. Finalmente, los agentes medioambientales han retirado el cadáver de la carretera.

Hace 10 meses, Ecologistas en Acción denunció el hallazgo de un lince ibérico atropellado en la carretera TO-7841-V que une San Pablo de los Montes con Las Ventas con Peña Aguilera. En ese caso, se trataba del lince 'Naipe', que formaba parte de las sueltas y reintroducciones del Programa «Life-Iberlince» que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha desarrolla en los Montes de Toledo durante los últimos años.

En concreto, la organización ecologista recordó que «Naipe» fue liberado durante la primavera de 2017 en la finca «El Sotillo», ubicada en Las Ventas con Peña Aguilera. Ecologistas en Acción lamentó las muertes por atropello en carreteras, que junto con los disparos y muertes en relación con los métodos de control de depredadores, son las principales causas de mortalidad de esta especie declarada en peligro de extinción, que con el programa de sueltas trata de crear una población reproductora estable en el entorno de los Montes de Toledo.

Los programas de recuperación del lince han surtido efecto. Apenas quedaban ejemplares en 2014 en Castilla-La Mancha; desde entonces, las administraciones han liberado animales criados en cautividad, que han generado posteriormente camadas. Los Montes de Toledo suponen uno de los tres hábitats de la región y suman 42 hembras reproductoras. El año pasado, en 2021, los especialistas contaron 36 camadas con un total de 104 cachorros en la provincia.