El cierre de la Circunvalación Sur de Talavera comienza a ser ya una realidad. Las máquinas han empezado a allanar la superficie que acogerá el tramo de kilómetro y medio que concluirá la carretera más esperada en la ciudad, uniendo finalmente la Ronda del Tajo con la Variante Suroeste y dando sentido a la infraestructura.

El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de la Dirección General de Carreteras de la consejería de Fomento, ha empezado la continuación de la ronda del Tajo de Talavera con una inversión que supondrá algo más de un millón de euros. Ya trabaja en ella la Unión Temporal de Empresas (UTE) adjudicataria, formada por la talaverana Asfaltecno Obras y Servicios S.A. y la constructora Consvial S.L.

Los primeros trabajos comienzan a verse ya cerca de la rotonda de la CM-4102 o carretera de Los Navalmorales, junto al Barrio Santa María, con maquinaria pesada y apertura del futuro vial. También se aprecia movimiento en la rotonda de la N-502, junto a la Variante realizada por el Ministerio de Fomento. Serán los dos extremos del proyecto, quedando unidas las glorietas por un nuevo vial de 1,5 kilómetros dando sentido, por fin, a la Circunvalación Sur.

mejores comunicaciones. El cierre de esta infraestructura tiene como fin último el impulso de las comunicaciones de la parte sur de la ciudad y las conexiones de Talavera con su comarca, especialmente a la zona de la Jara.

La finalización de esta carretera llega con más de 10 años de retraso. Cuando la Junta de Comunidades finalizó la Ronda del Tajo, en 2011, con la construcción del Puente de Castilla-La Mancha o atirantado como uno de los grandes hitos de la ingeniería española, no pudo cerrarse el último tramo que unía con la Variante Suroeste, realizada esta por el Ministerio y finalizada en 2015. La falta de un acuerdo de expropiación en terrenos de la empresa Viguetas Segovia, impidió el cierre total de la Circunvalación que buscaba aliviar el paso del tráfico pesado por el centro de la ciudad.

Ahora lo hace pero con una solución alternativa, sin una comunicación directa, lo que obliga a recorrer una distancia considerable hacia el casco urbano de Talavera, con el consiguiente incremento en los tiempos de recorrido.

movimiento. Una década después y casi tres legislaturas por medio, las máquinas comienzan a moverse tras la aprobación de estudios informativos, nuevas expropiaciones de terrenos y una modificación puntual del Plan de Ordenación Municipal (POM) para el nuevo trayecto del vial, que modificaba al anterior, con la mitad de trayecto.

El  plazo de ejecución estimado es de 15 meses por lo que las obras estarán finalizadas previsiblemente en el primer trimestre de 2023.