La portavoz del equipo de Gobierno, Noelia de la Cruz, ha explicado que se produce un incremento en el presupuesto con respecto al actual servicio de 1,5 millones de euros de manera anual. Este aumento va a permitir incluir la limpieza de zonas nuevas de la ciudad como la Bastida o Fuente del Moro y los rodaderos para «tenerlos en condiciones adecuadas de higiene y respeto medioambiental», entre los que se encuentran el paseo de Cabestreros, la ronda del Granadal, la avenida de la Cava o la ronda del Valle, entre otros.

Con este incremento también se cumplirá con la normativa de carácter europeo que incluye nuevos estándares de calidad y de economía circular y la inclusión de la quinta fracción o contenedor marrón para la basura compuesta por materia orgánica. «Es un reto y un desafío para los municipios al que nos tenemos que enfrentar y que estamos obligados a cumplir porque se trata de una normativa europea», ha explicado la responsable municipal.

Asimismo, el Gobierno municipal apuesta por mejorar la recogida selectiva en el Casco Histórico de la ciudad «incorporando la quinta fracción y compatibilizando la dificultad que supone la recogida selectiva en uno de los cascos históricos más grandes del país con el reto de cumplir con los estándares de calidad, reducir el número de impropios, ser eficaces a la hora de separar la basura y tratarla de manera correcta atendiendo a los criterios de sostenibilidad y economía circular».

El nuevo servicio de Limpieza y Recogida de Basura sale a licitación con un presupuesto de casi 80 millones de euros por siete años con posibilidad de prórroga un año más. El Ejecutivo local ha declarado urgente su tramitación en cuanto a los tramites internos que lleva todo procedimiento administrativo y ha ampliado el plazo para la presentación hasta el 30 de septiembre «teniendo en cuenta que estamos en época estival» y con el objetivo de que las empresas licitadoras «sean capaces de presentar los mejores proyectos para ofrecer este servicio en Toledo».