La casa Setdart subastará en Barcelona la semana que viene una representación de la Virgen del Sagrario de escuela toledana del siglo XVII. La pintura, cuyas dimensiones son 103 x 83,5 cm. (113 x 92,5 cm. con marco), muestra sobre fondo indeterminado la imagen de tres cuartos de una Virgen María con el Niño entre sus brazos. Su mirada al frente, la posición de sus manos, y la posición en que está Jesús respecto a su madre hacen pensar que se trata de una talla anterior a la época en que se pinta la imagen. Fue muy habitual en el siglo XVII vestir de esta manera a las imágenes de mayor veneración para respetarlas y actualizarlas a la vez, además de destacarlas y añadirles la riqueza que su ‘rango’ de personaje sagrado requiere.
Los elementos que portan tanto María como el Niño y los gestos de ambos, explican desde la casa de subastas, recuerdan en gran medida a la imagen de la Virgen del Sagrario de la Catedral de Toledo. Se la suele fechar hacia 1200, realizada en madera y cubierta de plata por completo (excepto cabeza y manos). Ya célebre en época de Alfonso X el Sabio, continúa Setdart, fue entronizada hacia 1226, destacándola todavía más Isabel la Católica. Durante la primera mitad del siglo XVII se le construyó una capilla, iniciada por Gaspar de Quiroga y terminada por Bernardo de Sandoval, cuya consagración fue presidida por Felipe III en 1616.
Como ya se ha mencionado, la posición de las manos de María en el cuadro barroco es muy similar a la de la talla toledana, como también la de los rostros de las dos figuras, si bien resulta clara la ‘actualización’ del estilo y del modelado de los volúmenes a planteamientos del barroco, más que seguir un estilo arcaico relacionado con lo medieval. Se sabe por textos que la Virgen del Sagrario se encontraba en el siglo XVII vestida con un rico manto de perlas y joyas. Además, la corona que se muestra en el óleo sería la más antigua de las dos importantes con que cuenta su tesoro en la actualidad (una base del siglo XV y resto de obra de Alonso de Montoya en 1568, o entre 1574 y 1586), y es realmente particular por su forma y las bandas y huecos que crea al frente. El rostrillo con perlas de María sería también un elemento habitual a la hora de ‘decorar’ o vestir las tallas medievales que movían una gran devoción en el Barroco y posteriormente, con una serie de joyas y elementos que pudieron haber sido donados por destacadas personalidades de la época.
El valor estimado de la pintura por la casa de subastas está entre 1.800 y 2.000 euros, si bien desde Setdart precisan que necesita restauración. La subasta finalizará el próximo jueves, 29 de agosto.