La Asociación de Vecinos Alcántara vuelve a insistir en el peligro de atropello que existe en la vía de servicio paralela al paseo de la Rosa, junto a la venta 'La Estrella'. El presidente vecinal, Luis Martín Ludeña, explica con preocupación que él mismo ha sido testigo de varios sustos y teme que cualquier día pueda haber consecuencias graves.
El problema, apunta Martín Ludeña, es que en este último tramo del paseo de la Rosa, junto a la parada de autobuses en sentido Polígono, hay un semáforo muy utilizado por los peatones. Como hay visibilidad, muchos conductores se percatan con tiempo cuando está en rojo, y tratar de evitarlo metiéndose por la vía de servicio paralela. Muchos de ellos lo hacen a toda velocidad, para salir unos metros más adelante a la rotonda de la Rosa. Y no llegan a percatarse de que a la altura del semáforo, también allí hay un paso de cebra. Después la mayor parte de los conductores no se meten en el barrio, sino que continúan en línea recta hacia la carretera del Polígono.
El problema es que hay un aparcamiento pegado al paso de cebra, que impide tanto que los conductores vean a los niños, por ejemplo, como a los propios peatones que distingan bien a los vehículos que por allí marchan a gran velocidad. En su día se eliminó, pero tras la obra del colector se volvió a instalar, con lo que «eso está muy peligroso». «No ha pasado nada, de momento, porque hemos tenido suerte. Yo ya lo sé y tengo cuidado cuando paso por allí, miro muy bien el paso de peatones, más cuando se pone en rojo el semáforo, porque sé que van a venir coches deprisa. El problema es para el que no lo sabe y no ve venir al coche. Ya he visto ya un par de sustos», insiste Martín Ludeña.
Semáforo o reductores de velocidad. Hace tiempo que la Asociación de Vecinos, recuerda su presidente, ya denunció esta situación en el Ayuntamiento y parece que sigue en estudio por parte de Movilidad. Ahora lo recuerda con el objetivo de que se busque un solución definitiva, que puede venir de la mano de un semáforo en la vía de servicio que se encienda al mismo tiempo que el del paseo de la Rosa, o la colocación de reductores de velocidad.