Los investigadores, el arqueólogo y gerente de la empresa 'Novas arqueología', Rafael Caballero, y el profesor del IES Consaburum Diego Rodríguez, presentaron el día 1 en el patio de la Escuela Municipal de Música y Danza de Consuegra su trabajo de investigación en la presa y acueducto de la localidad manchega. La protagonista es esta estructura hidráulica de 650 metros de longitud.

Los especialistas resumieron los resultados de los últimos años de investigación sobre la presa romana y el trazado del acueducto. Los avances están recogidos en un proyecto titulado 'Estudio del agua y del abastecimiento de la misma a la ciudad romana de Consabura'.

Los codirectores protagonizaron la presentación de las campañas realizadas entre 2018 y 2022. Rodríguez abordó los trabajos sobre el trazado y estudio del acueducto romano; y Rafael, por su parte, se centró en la presa.

El origen de los estudios se remonta al año 2014, con una orden de investigación aprobada por la Consejería de Educación y Cultura. Rodríguez apuntó que el acueducto romano figura mencionado en documentos del siglo XII. En las últimas intervenciones, los especialistas han encontrado la cubierta original del canal, así como la existencia de un pequeño sifón que salvaría una depresión del terreno antes de su entrada en Consuegra.

Sobre la presa romana, los autores han identificado dos fases de construcción, así como otras características singulares. Se trata de contrafuertes aguas arriba, riostrado de contrafuertes, zanjas de cimentación, rellenas de opus caementicium, zanja de construcción, contrafuertes aguas abajo y espaldones de tierra a un lado y al otro.

Los especialistas indicaron que la datación original aún es dudoda, pero la segunda fase de construcción o reparación se remonta a la época tardoantigua, entre los siglo IV y VI. Para ello, recurrieron por entonces a materiales de construcción de la cercana localidad manchega de Urda. El estribo izquierdo ha desaparecido, pero el derecho se conserva deteriorado bajo unas viviendas de campo.

cerca de la carretera. Los restos están localizados al suroeste del casco urbano de Consuegra, en plena vega del río Amarguillo. Los interesados pueden llegar por la carretera CM-4116, en dirección a Urda, a cinco kilómetros del núcleo urbano. Está a 250 metros del punto kilométrico 14,400.

Según el trabajo 'Consabura: ciudad y territorio' dirigido por Juan Francisco Palencia, se trata de la presa romana más larga de las conservadas en Europa y el norte de África. Este documento de 2014 detalla que el estado de conservación es relativamente bueno, pero faltan tres contrafuertes y el extremo izquierdo de la pantalla, por cuyo hueco discurre el río.

La presa fue declarada por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha Bien de Interés Cultural, con la categoría de monumento, en el año 1992. El uso del agua constituyó una manifestación de la grandeza del imperio romano. «El control del agua fue básico en esta zona, prueba de ello es el sistema hidrológico de captación y abastecimiento de agua», tal y como resalta el texto publicado en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha por declaración de BIC. «Creemos que la ciudad de Consabura estaría abastecida por al menos dos acueductos», subraya.

El sistema hidráulico quedó reforzado con la construcción posterior de la presa, como detalla el documento centrado en unos restos arqueólogicos muy desconocidos en la comarca de La Mancha.