La situación de la Tesorería municipal ya no es «buena»

M.G
-

El documento garantiza el cumplimiento de las obligaciones porque «hay liquidez suficiente», pero plantea una operación para evitar tensiones de Tesorería especialmente en los cinco primeros meses del año

Fachada del Ayuntamiento de Toledo.

Estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera. Estas palabras se han convertido en el ABC de los ayuntamientos para mantener su capacidad, tener a raya el déficit, intentar contar con remanente suficiente, pagar a los proveedores a tiempo y cumplir con la legalidad vigente.

El proyecto del presupuesto municipal de este año, que la semana pasada pasó por Pleno y se aprobó inicialmente, incluye un informe de Tesorería que entra a fondo en los ingresos y gastos para que no se produzca ningún descuadre que obligue al Ayuntamiento a dilatar los plazos de pago a proveedores más allá de lo exigido legalmente y propone «una operación» destinada específicamente para los primeros cinco meses del año para  garantizar que haya fondos suficientes en Tesorería.

En principio, Tesorería parte con un saldo inicial de caja de 17,5 millones de euros, prevé unos cobros de 81 millones de euros en este 2022  y unos pagos de 88 millones, con lo que a 31 de diciembre terminaría el ejercicio con un saldo de caja de 7 millones, una cuantía muy inferior  a la de 2021 aunque siga habiendo existencias.

El informe de Tesorería apunta que el Ayuntamiento «garantiza el puntual cumplimiento de sus obligaciones durante 2022, ya que tiene liquidez suficiente», con lo que no debería producirse problemas  ni retrasos en los pagos a los trabajadores, a las entidades financieras y los proveedores, «siempre que las facturas de sus prestaciones se tramiten dentro de los plazos legales».

En este caso, si se exceden los 30 días que marca la legalidad la disfunción vendría por «la deficiente tramitación de los gastos y no por un problema de liquidez». Además, Tesorería recuerda la existencia de un Plan de Disposición de Fondos del Ayuntamiento para afrontar el pago de todas las obligaciones que finalicen su tramitación «sin dar prioridad a unas sobre otras debido a que hay liquidez suficiente para atenderlas todas».

Sin embargo, Tesorería va más allá de este análisis y subraya «que la situación ha dejado de ser buena» y será necesaria «una operación» para que el Ayuntamiento no tenga problemas «en el cumplimiento de sus obligaciones», aunque no específica más sobre ello ni apunta la medida concreta, pero pone especial atención al primer trimestre del año, ya que la diferencia entre los cobros y los pagos arroja un saldo negativo de 6,7 millones de euros en tres meses. Aun así, también hay que destacar que la tesorería remonta en junio gracias al cobro de impuestos y tasas que ayudan a equilibrar de nuevo la balanza.

En cambio, sí se destacan las posibles causas que podrían llevar a un desequilibrio en las cuentas. Tesorería mantiene que parte de los cobros se van a ver «muy afectados» por la sentencia del Tribunal Constitucional en relación a las plusvalías y provocará «una salida muy relevante de fondos.

Además, hay que tener en cuenta que la previsión de recaudación líquida se plantea en cero euros «porque las devoluciones de ingresos minoran los derechos liquidados de corriente» y se plantea un escenario  a cero para los derechos reconocidos y para la recaudación, una circunstancia «que provoca una consumición de cuatro millones de euros».

Por otra parte, el presupuesto  plantea un gasto de 6,3 millones de euros sujeto al capítulo VI, es decir, destinado a inversiones, que también afectan al remanente porque la mayoría de ellas se realizarán con el remanente de Tesorería y «provocará una bajada en las existencias».

Otras circunstancias. Tesorería señala también que otra parte importante de las inversiones previstas para este año se financian a través de fondos europeos. Si bien, refleja que estas subvenciones «no se reciben hasta que las inversiones no han sido realizadas y aprobadas por el órgano concedente de la ayuda». Por tanto, la tesorería sufrirá también cierto «desfase negativo» en algunos periodos hasta que el Ayuntamiento  ingrese los fondos.

Tesorería no menciona 2023, pero si el presupuesto del próximo año sigue la misma línea el remanente de 7,4 millones de euros que quedará al cerrar este ejercicio será muy bajo para hacer frente a las obligaciones municipales de los primeros meses. Pero esta circunstancia se estudiará más adelante, en el siguiente proyecto presupuestario.