Tras el paréntesis festivo de San Ildefonso, Toledo recuperará mañana su ritmo habitual y la alcaldesa, Milagros Tolón, aconseja a los toledanos que cuando salgan a la calle, se paren un momento a pensar que «somos afortunados porque la ciudad de Toledo es una gran ciudad, una gran ciudad para desarrollar nuestros proyectos».

En el cierre del acto de entrega de honores y distinciones de la Ciudad de Toledo, la alcaldesa recordó que la ciudad es reconocida en todo el mundo por su identidad y sus raíces, pero mirando al presente y al futuro reivindicó que es «un referente y motor económico, cultural y social de la región». Apuntó que «en las ciudades vivas, y Toledo lo es, fluyen las ideas, las iniciativas, las propuestas, el desarrollo económico, la integración social, las relaciones personales».

Mucha culpa de que Toledo sea un motor económico, cultural y social de la región la tienen los reconocidos esta tarde, como la familia Brasal que hace cien años inauguró un horno de pan en Covachuelas y que ahora verá que dedican la calle Río Llano a su panadería. La alcaldesa alabó el producto que hacen y dijo que lo decía «a conciencia», pues come su pan todos los días.

Toledo, «motor cultural, social y económico» de la región - Foto: David PérezPor los 100 años de la muerte de Galdós, el Ayuntamiento le dedicará en homenaje el Paseo de Gracia. Tolón recordó que en 1932 se le dio el nombre del escritor canario a este emplazamiento, pero luego se perdió. Así que ahora lo recupera. Ypor los 50 años de la creación del colegio universitario de Toledo, la Universidad de Castilla-La Mancha, institución en la que se integró, recibió la Medalla de Oro.  «Cientos de jóvenes tuvieron y tuvimos la oportunidad de cursar carreras universitarias aquí», valoró.

Hay quien ha dado impulso en la ciudad también en lo deportivo. Es el caso del atleta Fernando Fernández Gaitán, nombrado Hijo Predilecto. Además de sus méritos deportivos, la alcaldesa le dio las gracias «por ser tan buena persona»y por el desarrollo del Patronato Deportivo Municipal. También le agradeció que haya abierto las puertas del deporte a la nueva generación de atletas toledanos, como Irene Sánchez Escribano y Lucas Búa, reconocidos ambos como Ciudadanos de Honor y a los que Tolón espera ver en los Juegos Olímpicos de Tokio. «Sabed que todos los toledanos estaremos con vosotros», les dijo.

Con sabor a despedida, el arzobispo de Toledo Braulio Rodríguez Plaza fue reconocido como Hijo Adoptivo. Tolón, que recordó que suya fue la primera carta que recibió cuando fue elegida alcaldesa, no ocultó que Toledo le agradece especialmente que fuera quien recuperase la procesión del Corpus Christi solo en jueves.

Las otras dos distinciones de Hijos Adoptivo fueron a título póstumo. De Santiago Palomero, que fue director del Museo Sefardí, Tolón destacó su compromiso por la divulgación patrimonial y la investigación histórica, recalcando su «agudo y constructivo sentido crítico».  «Trabajamos para recuperar el legado sefardí en la ciudad», contó.  Al hablar del sindicalista Juan José González, la alcaldesa volvió a los años en los que en el Polígono  empezaba a «agitarse el panorma social, sidical y político». De él destacó que «jamás fue sectario y fue gran defensor del diálogo para alcanzar acuerdos».