Eduardo Fernández, un vecino de Robledo del Mazo, se conoce como la palma de su mano la microrreserva de 'Las Lanchas', un paraje extraordinario que resultó amenazado el pasado verano por un incendio. Las llamas rozaron apenas el enclave y no tocaron el cogollo, lo que supuso un suspiro de alivio para los vecinos del Valle del Gévalo y para todos los aficionados a las actividades de la naturaleza. Pero la semana pasada, este pateador de este rincón de La Jara vio unos grafitis en una cueva recóndita, conocida como 'La huerta'.
«Es una chiquillada», apunta a este diario la alcaldesa de Robledo del Mazo, Ana Belén Galán, quien cree que se trata del primer acto de vandalismo de este tipo en la microrreserva de Las Lanchas. En este sentido, considera que supone «un hecho aislado».
La cueva se encuentra entre los saltos de agua que han popularizado este paraje localizado en Las Hunfrías, una pedanía de Robledo del Mazo. «Han ido a hacer el tonto», lamenta Eduardo, quien apunta que la cavidad contiene unas pinturas rupestres.
Desde hace más de 40 años, los visitantes encuentran en el interior de la 'cueva de la huerta' un cuaderno para que los senderistas escriban dedicatorias o impresiones del lugar. Uno de estos ejemplares apareció también dañado. Al respecto, Eduardo recuerda que un familiar suyo empezó esta costumbre tras el fallecimiento de otro allegado a consecuencia de un accidente con un árbol en este extraordinario paraje.
La Garganta de las Lanchas es un pequeño valle boscoso recorrido por un arroyo que vierte sus aguas al río Gévalo, protegido por su valiosa variedad de especies amenazadas de flora y fauna, así como por su interés paisajístico, en el que destaca la presencia de varios saltos de agua. Declarada Microrreserva en mayo de 2003, con una superficie aproximada de 435 hectáreas, está incluida en la Red Natura 2000 y forma parte del Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y de la Zona de Especial Protección para las Aves 'Montes de Toledo'. También forma parte del área crítica del águila imperial y de la cigüeña negra, según informa al respecto la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.