Los Miami Heat demostraron su gran estado de forma y dieron un paso más para jugar la final de la NBA tras imponerse este jueves en otro disputado duelo a Boston Celtics por 106-101 en el segundo partido de la final de la Conferencia Este.

El conjunto de Erik Spoelstra ratificó su fortaleza desde que se iniciaron los playoff y elevó a 10-1 su balance en la postemporada, en esta ocasión con el mérito de remontar a su rival que le había dominado en la primera mitad y arrollarle en un espectacular tercer cuarto.

Los de Brad Stevens, que habían caído por 117-114 tras una prórroga en el primer partido, salieron decididos a igualar la eliminatoria y firmaron una gran primera parte que les llevó a los vestuarios con una buena renta de 47-60, gracias sobre todo a un buen segundo cuarto donde dejaron a los Heat en 19 puntos y en el que rozaron la veintena de puntos de ventaja.

Los Heat se acercan a la final de la NBA - Foto: ERIK S. LESSER

Sin embargo, tras la reacción de Miami fue demoledora, con una impecable mejoría defensiva ante la que se atascó Boston, acompañada por el acierto ofensivo que no había hecho acto de aparición. Todo resultó en un 37-17 de parcial que volteó el marcador de forma inesperada para los 12 últimos minutos (84-77).

Los Celtics también quisieron mostrar que son un equipo con un gran carácter competitivo y tiraron de su defensa para equilibrar el partido y con un triple de Kemba Walker pusieron un peligroso 89-94 a falta de algo más de cuatro minutos. Pero a los de Spoelstra aún les quedaba un último arreón, liderado por Jimmy Butler y Goran Dragic, y endosó un 13-1 ante el que su rival ya no pudo responder, pese a que tuvo un triple de Jaylen Brown para empatar.

El escolta esloveno de Miami fue el mejor de los suyos con 25 puntos, bien secundado por el doble-doble (21 y 10 rebotes) de Bam Adebayo, mientras que Walker (23), Brown (21) y Jayson Tatum (21) fueron los más destacados en la franquicia de Massachussets, obligada a reaccionar este sábado en el tercer encuentro.