Las peluquerías continúan la batalla para su rebaja del IVA

Lola Morán Fdez.
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Desde Agrestac quieren reunirse con la Administración central para abordar esta petición que esperan que sea atendida en la reforma fiscal anunciada para 2022

Un momento de la protesta que llevó a cabo el sector el pasado 17 de mayo. - Foto: Reviejo

El sector de las peluquerías y estética sigue en pie de guerra para conseguir una reducción del IVA para su actividad al 10%, algo que esperan que llegue de la mano de la anunciada reforma fiscal anunciada por el Gobierno central para el año 2022. Una demanda que desde algunos puntos de la geografía española se está reivindicando a través de encierros de los profesionales en sus propios establecimientos, medida que se viene realizando durante todo este mes.

En el caso concreto de Talavera, la presidenta de la Agrupación de Estilistas de Talavera y Comarca (Agrestac), Eva Andrés Gómez, confirmó que han optado por esperar al próximo mes de febrero para comprobar si en esa reforma fiscal se materializa esa reducción del IVA del 21% actual al 10% comprometida en su día por el Gobierno central y que aún no se ha materializado.

Los peluqueros de Talavera y comarca sí se movilizaron el pasado 17 de mayo, sumándose a la concentración nacional del sector para exigir al Gobierno central que cumpla ese compromiso de reducir el IVAde las peluquerías al 10%. Una iniciativa que fue secundada por alrededor de una treintena de salones de peluquería, si bien estaban convocados más de 150.

Por ello, en esta ocasión actuarán bajo el paraguas de la Plataforma de Peluqueros Unidos, desde donde se ha solicitado un encuentro con representantes del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, con el que ya se ha mantenido una reunión el pasado septiembre. Entonces, según indicó Gómez, se les trasladó que apoyarían sus reivindicaciones, si bien de momento «se han aprobado los Presupuestos sin que bajen el IVA de nuevo».

Por tanto, desde el sector enviarán un escrito a los representantes del Gobierno central de PSOEy Podemos para que atiendan esta reivindicación. Como explicó la presidenta de Agrestac, ya se hizo en su momento con el resto de grupos políticos, desde los que se han planteado una serie de enmiendas para pedir esta reducción del IVA al 10%, pero que han sido «vetadas» y no han salido adelante.

«Al final los que tienen que bajar el IVA son ellos -por PSOE y Podemos- y les vamos a mandar unos escritos con nuestra indignación porque es muy injusta la situación que estamos viviendo y no se dan cuenta o no quieren darse cuenta», expuso la peluquera.

Ahora, según dijo, la vista está puesta en el próximo mes de febrero, puesto que será entonces cuando acabe el plazo marcado desde el Gobierno a un comité de expertos para entregar sus recomendaciones para acometer una reforma fiscal para el año 2022.

El de las peluquerías es uno de los muchos sectores de actividad que están aprovechando para reivindicar la inclusión de una bajada del tipo impositivo de IVA para su actividad. 

Hasta entonces, el sector solicitará una nueva cita con el Gobierno central «para que nos vuelvan a escuchar e intentar que se revierta la situación, que por ahora es desfavorable». Si en febrero no se consiguiera este propósito, «tendremos que volver a salir a la calle o hacer lo que haga falta porque así no podemos estar».

Situación «criminal». Como expuso la presidenta de Agrestac, el mes de noviembre de por sí es «de vacas flacas» y no será hasta diciembre cuando puedan comprobar si la situación ha mejorado respecto al año pasado,  cuando fue «criminal».

Hasta el momento, «todas estas personas que se están movilizando y encerrando en sus salones es porque están con la soga al cuello».

Como indicó, muchos profesionales han ido «aguantando» estos meses, si bien «ahora en febrero acaban los ERE» y si  no se puede hacer frente al pago de las nóminas y han de despedir a empleados, «no saben de dónde van a sacar el dinero».

Talavera «lleva mucho tiempo mal» en el plano económico, por lo que desde Agrestac consideran que si bien diciembre «puede que dé una especie de respiro, pero luego llegan las vacas flacas de enero y febrero y si la Semana Santa cae en abril, marzo va a ser una prolongación de febrero». Por ello, ya son «muchos meses» con una situación «desesperada, pero parece que no se quieren dar cuenta».

Gómez indicó que se suma el incremento del precio de la luz, suministro básico en el ejercicio de la peluquería, sector en el que se siguen abriendo negocios en la ciudad, aunque «cierra a los pocos meses» para reabrir de nuevo con el mismo resultado poco después, según indicó.