Más que satisfecha. Así se encuentra Irene Sánchez-Escibano después de su debut, el pasado día 21, en los 3.000 obstáculos esta temporada. Por encima de proclamarse subcampeona iberoamericana, lograr la mínima para el próximo Campeonato de Europa y colgarse su primera medalla internacional, el registro de 9:37.08 que marcó en el estadio Olímpico Cano de La Nucía suponen el mejor inicio de siempre para la toledana. Y viniendo de lesión, es decir mucho.

Así se lo ha tomado. «Estoy muy contenta porque venía de realizar entrenamientos muy normalitos y este tiempo es genial», reconoce la atleta del Adidas. Lo cierto es que se encontró «mejor de lo que esperaba», sobre todo por la incertidumbre que le generaba este estreno después «de un año que ha sido muy difícil». Hay que recordar que Sánchez-Escribano se quedó fuera de los Juegos Olímpicos de Tokio y también del Europeo de Cross, cuando incluso había viajado con el resto de la selección. Esta medalla de plata, por tanto, es «un regalo» de cara a un verano que se presenta «ilusionante» y cargado de competiciones. «He empezado con buen pie y quiero mantener la racha», reconoce la toledana.

En su lista de objetivos, tiene apuntado uno muy bonito, ser campeona de España de 3.000 obstáculos por séptima vez en su carrera. Palabras mayores. Por lo demás, ya tiene plaza para vestir de nuevo la 'Roja' en el Europeo de Múnich, que se desarrollará entre el 15 y el 21 de agosto. Pero antes, del 15 al 24 de julio, Irene Sánchez-Escribano confía en haber sumado otra internacionalidad más. Eso querrá decir que habrá viajado a Eugene, en el estado norteamericano de Obregón, donde tendrá lugar el Campeonato delMundo.

De momento, la corredora capitalina tendrá que acumular más pruebas en sus piernas, y la siguiente llegará el próximo 6 de junio, con el Mitin de Hengelo (Países Bajos), donde volverá a medirse a rivales importantes.