La procesión del Corpus Christi en Toledo también dejó incidentes que lamentar. Y es que las ganas por celebrar de muchas personas no pudieron con el calor, que fue protagonista en la mayoría de las incidencias de todo el día. Gracias al medio centenar de voluntarios que Cruz Roja y Protección Civil repartieron por todo el recorrido procesional, con un punto de primeros auxilios para cada entidad y con hasta tres ambulancias se pudieron socorrer los problemas que iban surgiendo de la manera más rápida posible.
Voluntarios de Cruz Roja atendiendo incidenciasSegún informaron desde las propia organizaciones, se registraron más de 60 intervenciones para atender caídas , mareos, golpes de calor, muchas lipotimias y hasta una convulsión. De todas ellas, ninguna parece revestir gravedad, pero seis personas sí que requirieron de ser trasladados al Hospital Universitario de Toledo. Algunos de los desvanecimientos o golpes de calor se produjeron durante el paso de la procesión en puntos como la plaza de Zocodover, donde las sillas para los espectadores estaban situadas a pleno Sol. Pero no solo para los espectadores. La procesión también se acabó antes de tiempo para alguno de los integrantes de la misma. Fue el caso de uno de los sacerdotes que acompañaban a la Custodia de Arfe, que sufrió un desvanecimiento en plena alocución del arzobispo de Toledo, Francisco Cerro. Inmediatamente fue atendido por los voluntarios de Cruz Roja sin mayores consecuencias. Este trabajo fue recompensado por los presentes en el recorrido procesional, que no dudaron en ovacionar a los vehículos sanitarios y sus profesionales.