El día que más se necesitaba, el CD Toledo dio un portazo y se escapó de la jaula. Entre que se topó con un rival osado y la dinámica positiva, se embolsó un set en blanco frente al Quintanar del Rey, cuyo descaro se tornó en inconsciencia. El caso es que los verdes están ya directamente en semifinales y a dos partidos del ascenso a Segunda RFEF.

Los dos equipos arrancaron el encuentro en quinta marcha. Como si el futuro dependiese de estos tres puntos, el CD Toledo no anduvo con reservas y mostró su versión más vertical de la era Merino. Pudo crear peligro porque el rival también se fue arriba a presionar, en busca de errores. En el minuto 7, Esparza exprimió los espacios por su banda para mandar el balón al otro lado. Rubén Moreno lo recogió, le hizo un lío a un defensa y le dio un pase envenenado a Fran Sabaté. El problema es que varios contrarios se le echaron encima.

Poco después, aprovechando un ataque sin acabar del CD Quintanar, Esparza arrancó el motor de nuevo y, esta vez, se la cedió a Rubén Moreno, que optó por tirar desde lejos para obligar a César a irse abajo. Pero el portero visitante, todavía caliente, se quitó de encima un cabezazo de Rodri en un saque de banda lejano de Chele.

El CD Toledo se escapa de la jaula (6-0)Los de verde querían mantenerse subidos en la ola y mantuvieron metida la marcha más larga. No podían fiarse porque el equipo contrario también era capaz, con cuentagotas, de salir de la presión del Toledo. No pudo acabar jugadas porque casi siempre incurrió en fuera de juego. Con varios saques de Chele, los de Diego Merino metieron de nuevo miedo al Quintanar, aunque sin ninguna genialidad ni rebotes a favor. Puestos a pedir...

Sin embargo, en el minuto 27, Kain se apoyó en un compañero y se metió en el área para sacarse un lanzamiento cruzado con la intención de colarse por la escuadra. Se marchó fuera. El cuadro conquense se dejó ver en ataque, sobre todo por el costado izquierdo, y eso impidió bajar la concentración.

Ese arrojo inicial se aplacó antes de la media hora de juego. El CD Toledo retrasó un poco las líneas para quedarse a expensas de los quintanareños. A balón parado provocó cosquillas, nada más. Y quien sí acabó haciendo daño fue el conjunto de verde. Rubén Moreno presionó a Marcos en el inicio del juego y le acabó quitando la pelota. Se la dio a Leo Blázquez, pero el centrocampista congeló el partido con un quiebro y esperó la llegada del ‘9’, que no perdonó el 1-0.

El CD Toledo se escapa de la jaula (6-0)El tanto nació en el momento de menos superioridad, pero quitó unas cuantas piedras del camino. A falta de cinco minutos para acabar la primera parte, el viaje tranquilo empezó a encarar baches. El CD Quintanar entró en cólera por una supuesta agresión de Ricar a Mansour dentro del área, después de un córner. Hervás Muñoz no se lo pensó y Rubén Moreno, casi ya en el descuento, marcó el segundo desde el punto fatídico.

Mientras tanto, el partido desplazó el foco a la grada, cuando un grupo de seguidores verdes se fue a la valla a increpar a la hinchada visitante, metida en la ‘jaula’. La misma marrullería de la que se quejaban algunos hace tres semanas en el San Marcos. Y así, con fútbol indeseable, llegó el descanso. Ya sin calenturas.

Lo mejor para la segunda parte debía ser no bajar la intensidad. O marcar algún gol más. Ambas cosas. Primero, Fran Sabaté la coló de falta directa por el primer palo, cuando todos esperaban un centro. Y, luego, Rubén Moreno firmó su triplete en otro robo de Leo Blázquez en el medio campo.

El CD Toledo se escapa de la jaula (6-0)El partido estaba completamente roto por el resultado y Diego Merino, ahora sí, reservó jugadores con los primeros cambios. Entraron Cubero y Álvaro Antón. El Toledo se había desatado y, con espacios, Fran Sabaté pudo marcar el quinto.

Jesús Gómez agotó sus modificaciones y Merino metió también a Nico. El público se dividió entre los que querían que se terminase porque estaba todo hecho y entre los que necesitaban una venganza mayor contra el rival. Titi pisó el césped por el protagonista Rubén Moreno para el último cuarto de hora. Justo ahí apareció Álvaro Antón para marcar de nuevo otra falta directa. Hacía mucho tiempo que no pasaba.

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