El espacio literario de Los Montes de Toledo

Jaime Galán
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Rafael Cabanillas presentó ayer su libro 'Valhondo', que pone de nuevo en valor esta zona de la provincia, con una novela intimista y personal sobre el mismo universo, el fenómeno de la despoblación

Rafael Cabanillas y su trilogía en la Biblioteca de Castilla-La Mancha.

No hace falta poner en el mapa a Los Montes de Toledo porque son de sobra conocidos, pero quizás sí hace falta resaltar a su gente. Al pastor del campo, al carbonero o al empresario que dejó su pueblo para desarrollar su carrera profesional en una gran ciudad pero que sigue volviendo a su pueblo cuando tiene unos días libres. Toda esa gente se siente o se sentirá identificada en los personajes de 'Valhondo', la novela que amplía la trilogía 'En la raya del infinito' del autor Rafael Cabanillas.

Tras el éxito de 'Quercus' y 'Enjambre', las dos novelas ambientadas en Los Montes de Toledo, Cabanillas presentó ayer en la Biblioteca regional el culmen de la trilogía. Además, el autor aprovechó que una hora antes de esta cita el centro le había concertado un encuentro con lectores de 'Quercus' para conocerle e interactuar con él, que ya continuó seduciendo sus apetitos literarios con la presentación en Toledo de esta última obra.

El propio Rafael Cabanillas mencionó que tenía ilusión por llegar a Toledo porque venía de presentar 'Valhondo' oficialmente con acompañantes o padrinos de prestigio como José Mota o la periodista Mercedes Martel. 

El caso es que para cumplir uno de los objetivos de su trilogía, el de «universalizar Los Montes de Toledo como Joyce James hizo de Dublín en su novela 'Ulises'», el autor reconoce que era obligatorio pasar por la capital de la provincia.

Sobre el contenido del libro, Cabanillas avisa a los nuevos lectores que pueden leer cualquiera de las novelas en orden variado, porque «los personajes son diferentes». Dicho esto, 'Valhondo' es la versión más intimista y personal del autor. Un contexto que se debe a que da vida al personaje de la obra en sus propias carnes, un Rafael que llega a este municipio de la sierra toledana con 20 años de edad para ser el profesor de una escuela unitaria para 25 alumnos. Viviendo en la única casa de la localidad con agua caliente, el maestro ofrece una metodología particular a sus pupilos con un modelo humanista. 

Una historia tan real que, 40 años después, aquellos alumnos que aprendieron de la filosofía educativa de Rafael se presentaron ayer en la Biblioteca del Alcázar de Toledo, para que el que fuera su profesor pudiera firmarles el libro en el que ahora cuenta aquellas vivencias. Esto es, por tanto, la mayor prueba de lo que describe el propio autor, que se ha desnudado en la novela y que ha dado voz a aquellos que fueron silenciados o amordazados por el fenómeno de la despoblación.