El BM Ciudad Imperial cumple de momento los objetivos. El histórico triunfo del pasado sábado en el pabellón de Santa Bárbara supone el primer paso para seguir cimentando el objetivo de permanecer en la División de Honor Plata recién estrenada. Su técnico, Diego García, reconoce que los ánimos estaban bajos tras el resultado tan abultado cosechado en la primera jornada en Boadilla, pero ahora se afronta con optimismo la visita al Balonmano Getasur.

«La moral estaba por los suelos y cundía la desilusión, incluso llegas a dudar de tu rendimiento y del trabajo que habíamos realizado durante la pretemporada», sostiene el preparador, que, sin embargo, está muy contento por la imagen ofrecida por sus jugadoras contra el BM Solúcar: «Después de cómo nos ganaron en la fase de ascenso, salieron a morder; ha sido una victoria importantísima, y nos hacer ver que podemos competir».

Así, el marcador de Boadilla del primer día está ya «más que olvidado» porque «se ha jugado bien y se ha ganado». Además, García destaca que dejaron con solo 17 goles al rival, y que su portera «tuvo un 50 por ciento de acierto». Es otro pilar importante para la permanencia en la categoría «sacar adelante los partidos de casa ante equipos de nuestra liga». Lo de jugar a domicilio ya será más complicado, pero el técnico del equipo capitalino cree que están en condiciones de «ir al máximo y rascar también algo a los rivales directos».

Otro de ellos es el de este sábado, el Balonmano Getasur, al que Diego García cree accesible. «Aunque llevan siete u ocho temporadas en Plata, todavía no han ganado, así que, si conseguimos hacerlo nosotros, sería ponerlo ya a 4 puntos; todavía queda mucho, pero ya es un colchón». Al menos, el BM Ciudad Imperial va a afrontar este segundo viaje corto con «toda la moral del mundo». Eso sí, el equipo madrileño sí que tiene «tablas y experiencia».