El Soliss Águilas de Toledo volvió el pasado sábado a la competición con un partido en el campo de rugby de la Escuela de Gimnasia en el que recibió al Jabatas Móstoles RC. Era el encuentro de vuelta y las toledanas lo encaraban conscientes de la dificultad que entrañaba, además de ser decisivo para la clasificación para los 'playoff', al encontrarse a dos puntos de su rival.

A las Águilas les costó concentrarse y meterse en el juego al principio, así que la desorganización reinó en las filas toledanas, lo que favoreció que llegase el primer ensayo para las Jabatas en el minuto 5. No fue fácil encarrilar el encuentro y proponer ataques que llegaran a la línea de ensayo de las rivales. Sin embargo, Las Águilas comenzaron a crear opciones y se pudo observar la coordinación y comunicación en el juego, lo que les llevó a estrenar el marcador con una jugada de continuas descargas en los apoyos que terminaron en el ala.

De todos modos, el juego que presentó el cuadro castellano-manchego fue inconstante y eso se tradujo en ensayos por parte de las madrileñas, que, evidentemente, aprovecharon cada fisura en la defensa que tenían enfrente. El parcial del primer tiempo fue de 5-29.

El segundo periodo supuso un cambio de ritmo en el juego de Las Águilas. Aumentó la contundencia de los placajes en defensa y la comunicación en ataque, aunque no lo suficiente como para darle la vuelta al encuentro. Es te parcial, de 12-12, dejó claro que, al menos, el equipo toledano equilibró el choque, aunque sin estar por encima como para materializarlo en el marcador.