El CD Toledo continúa peleando por mantener viva la llama de la permanencia en esta dura Segunda RFEF mientras en la entidad se van aclarando muchas dudas y parece que hay luz al final del túnel financiero y deficitario.
Los toledanos han mejorado sus aptitudes en defensa y en ataque, aunque por más que lo intentasen no pudiesen pasar del empate a cero en casa ante el Recreativo Granada. Los pupilos de Javi Sánchez hicieron todo lo que estuvo en su mano para ganar pero cuando la pelotita no quiere entrar... Nadie puede dudar que este equipo es otro y que jugando tan serio en ataque y defensa como el pasado domingo puede lograr sus objetivos.
En el primer tercio de liga, el CD Toledo fue junto al CD Marchamalo, el peor equipo del grupo con diferencia. No había más que impotencia y falta de resiliencia. No se le veía capaz de sacar puntos en el Salto del Caballo, y mucho menos fuera. A día de hoy, los verdes se encuentran por juego y capacidades en un nivel muy por encima de lo que refleja la clasificación actual. Ahora sí se ve a un conjunto capaz de lograr puntos en cualquier estadio y terreno de juego. No se le observa inferior a ningún equipo de este Grupo 5. Con esto no quiero decir que sean los mejores y que esto sea un paseo. En este momento, sí tiene, por lo menos, el potencial de poder rascar algo ante cualquiera, y eso va a tener que hacer si quiere seguir peleando por un sueño que está muy lejos por el momento.
El encuentro de este domingo a domicilio ante un transatlántico como el CF Intercity dará o quitará razones, pero será un buen punto de partida si se consiguen traer botín de Alicante.
La rémora engominada del inicio ligero es muy grande, pero no insalvable, siempre y cuando el equipo que se vea en el campo sea el del pasado domingo y no el que se vio en el Cerrú ante el Calvo Sotelo Puertollano.
La actual plantilla es más compensada y lo más importante, tiene las ideas de juego claras en ataque y defensa, solo queda que la pelotita entre y poder creer. De no ser así, si hay que descender, se desciende, pero dando la cara en cada partido y dejándose todo. Ya habrá tiempo de hacer balances.
Es tiempo de creer, de dejarse todo y esperar que el fruto del trabajo bien hecho sea recompensado. Argumentos y hechos sí hay a día de hoy, solo hace falta cambiar la dinámica.