La visita al diezmado Extremadura significó el reencuentro del Talavera con la victoria siete jornadas después (0-2). Forgás abrió la cuenta en el primer cuarto de hora y el revulsivo Rodrigo la cerró superado el tiempo reglamentario. El Talavera, en el que debutó el recién fichado Dani Ndi, escala tres puestos en la clasificación, abandonando la zona de descenso. La superioridad física de los jugadores de Víctor Cea fue patente. El Extremadura, que solo pudo convocar a 14 jugadores, plantó sobre el césped del Francisco de la Hera una alineación con un amplio número de canteranos. Frente a ello, Víctor Cea dispuso una alineación muy experimentada en la categoría.
Forgás volvió a ser de la partida aunque esta vez acompañado por Perales en la punta de ataque. Los extremos correspondieron a Añón y Dani Pichín. La otra novedad de inicio fue la entrada de Juanma como central izquierdo. En el minuto inicial de juego, el Talavera tuvo la primera ocasión. Un balón largo de Juanma sobre la línea ofensiva culminó con un disparo de Forgás que fue blocado por el portero Álex Guillén, que también detuvo el rechace capturado por Perales. Esta llegada representó el primer ejemplo de una acción que se repetiría durante los primeros minutos. De hecho, las faltas botadas desde campo propio por el Talavera fueron colgadas al área local. Álex Guillén tuvo ocasiones sobradas de demostrar que la portería del Francisco de la Hera está bien cubierta pese a la reciente salida de Casto. Así, el canterano impidió un gol de Dani Pichín haciendo una espectacular parada. Fue total el monólogo del Talavera.
Y como premio al buen hacer de los futbolistas de la escuadra cerámica, el gol no tardó en llegar. Forgás inauguró su cuenta de goles en su segundo partido al rematar con una media volea por el primer palo un centro de Dani Pichín servido desde el costado izquierdo. Tan significativo como el gol fue el abrazo en el que se fundieron el delantero catalán y el entrenador visitante, Víctor Cea. El tanto no modificó la dinámica del encuentro. Las aproximaciones ofensivas de los jugadores de la escuadra blanquiazul se sucedieron. Únicamente el buen hacer de Álex Guillén y la mejora en facetas defensivas del Extremadura impidieron ver más goles en la primera parte. A Forgás y Choco le pesaron sendas tarjetas amarillas recibidas y dejaron su posición a Toño Calvo y Víctor Ruiz al regresar de los vestuarios. Víctor Cea no quiso arriesgarse a padecer una expulsión en un partido absolutamente controlado.
Mejoró ligeramente el equipo entrenado por Manuel Mosquera alrededor del minuto 55 buscando encontrar sensaciones con la posesión. No obstante, Juanma y Bourdal repelieron todos los acercamientos peligrosos. La grada del Francisco de la Hera intentó espolear a los suyos, pero el Talavera permaneció firme en sus intenciones con un Toño Calvo especialmente incisivo en las acciones de ataque. Ganó posesión de balón el equipo visitante a costa de perder algo de potencial en el juego directo. El otro jugador amonestado del Talavera, Perales, fue relevado por Rodrigo. Asimismo, debutó el flamante fichaje Dani Ndi, recambio de Añón.
El local Manuel Mosquera reaccionó refrescando su delantera con Fran Rosa para crear algo de peligro en los últimos minutos contra la meta defendida por Miño. Con más coraje que juego, los últimos minutos fueron del Extremadura. Los jóvenes jugadores locales dominaron a un Talavera más pendiente del paso de los minutos. La cosa estuvo a punto de salir mal, porque, en el minuto 91, David Mosquera, hijo del entrenador Manuel Mosquera, dispuso de un cabezazo franco dentro del área que salió por encima del travesaño. En el minuto 93, un córner ejecutado por Víctor Ruiz desde la izquierda fue rematado a la red con el pie sin oposición en el área pequeña por Rodrigo para sentenciar el choque y amarrar tres puntos de oro en el casillero del Talavera que le sirven para acabar la primera jornada de la segunda vuelta fuera de los puestos de descenso.