El jefe superior de la Policía Nacional de Madrid, Manuel Soto, fue el primero en relacionar en la mañana de ayer que el cadáver encontrado el pasado jueves en el vertedero de Toledo era el de uno de los dos primos menores de edad desaparecidos en Madrid el pasado 10 de diciembre. Posteriormente, según transcurrió la mañana, el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, se encargaba de confirmar la terrible noticia, cuando una prueba dactilar revelaba que se trataba del cadáver de Fernando Fernández García, de 17 años de edad.

Según ha tenido acceso La Tribuna de fuentes policiales, el cuerpo hallado en el Ecoparque de Toledo se encuentra completo (algunos medios mencionaron a lo largo de la mañana la posibilidad de que estuviera descuartizado) y la causa de la muerte, a falta de una segunda autopsia que corrobore los resultados, es la asfixia.

El cadáver no tiene signos de violencia que se puedan relacionar con una causa directa de su muerte, aunque sí que se encuentra afectado por los procesos propios del tratamiento de residuos, tal y como confirmó ayer el delegado del Gobierno.

Así, la hipótesis que baraja la Policía Nacional es que la muerte del joven fue accidental, teniendo como principal sospecha que ambos menores decidieran dormir en el interior de un contenedor de la ciudad de Toledo para resguardarse del frío y la lluvia. Posteriormente, al quedarse dormidos, muy posiblemente no se percataron a tiempo de la recogida del contenedor, siendo atrapados en el camión y perdiendo ambos la vida por falta de oxígeno.

De esta forma, teniendo en cuenta esta posibilidad aún por confirmar, está previsto que en la jornada de hoy se intensifique la búsqueda del cuerpo del otro menor que acompañaba a la víctima, su primo Ángel Fernández, de 11 años.

La desaparición de ambos jóvenes en Madrid el pasado 10 de diciembre está llena de interrogantes. Tantos que en un primer momento, tras el hallazgo del cuerpo de Fernando, se empezó a especular con un secuestro.

Lo cierto es que a los dos primos se les perdió la pista a la salida del Hiper Usera de calle General Ricardos, en el madrileño barrio de Carabanchel. Las cámaras del centro comercial les registraron, al parecer, entrando solos y saliendo por otra puerta, hasta meterse en una boca de metro.

Además, según ha podido confirmar este medio, existe una grabación de las cámaras de seguridad de la estación de autobuses de Toledo en la que ve a los dos menores deambulando por la zona solos, lo que apunta a que vinieron hasta la ciudad de forma voluntaria.

La posibilidad de que decidieran dormir en un contenedor explicaría el fallecimiento, y es por eso que la Policía espera poder hallar el cuerpo del segundo menor en las próximas horas.

En la jornada de ayer se desplazaron hasta el vertedero de Toledo agentes de la Policía Judicial de Villa de Vallecas, así como de Homicidios y Policía Científica de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, aunque parece ser que finalmente la comisaría de Toledo será la que se encargue de confirmar las circunstancias exactas de la muerte del joven y si su primo se encontraba con él.