En la escalera que sube a los Juegos Olímpicos de Tokio, Lucas Búa ya está a tres días del siguiente escalón. El atleta toledano vuelve al tartán este fin de semana en el Campeonato de España Absoluto en Pista Cubierta que se celebrará en Orense. Su objetivo no es otro que seguir arañando todo lo que se pueda su mejor registro de la temporada  en los 400 metros (46.93), sin descartar, lógicamente, una medalla.

El corredor del FC Barcelona ya fue campeón de España indoor en 2016 y 2018, así que va a por su tercer oro. En la lista de competidores no aparece Óscar Husillos, lesionado, pero sí Samuel García y Manuel Guijarro, que ahora mismo acreditan un registro mejor que el suyo. «Ahora mismo me encuentro en el mejor momento de la temporada y, sin dolor, creo que puedo luchar con ellos, aunque Samuel está muy fuerte», explica. Su año está enfocado a la competición al aire libre, pero necesita acumular carreras para recuperar su cien por cien.

Y es que, hay que recordar que una lesión le tuvo parado muchos meses en 2019 y, por tanto, no ha tenido la continuidad de sus competidores. Aún así, se están cumpliendo los planes previstos para este año y Búa ha ido mejorando sus marcas en las competiciones en las que ha participado.

El sábado arrancará su participación en Orense con la semifinal, prevista a partir de las 13:10 horas. La final será el domingo a las 12:30 horas. Lo importante es que físicamente se encuentra sin problemas y la lesión ya está olvidada. «Siempre tiene miedo y tardas meses en arrancar, pero todo es pasado», añade el capitalino.

Después del Campeonato de España se tomará unos días descanso para ejercitarse ya de cara al aire libre. Al margen de seguir mermando su mejor marca de los 400 metros, la selección española del relevo 4x400 metros necesita al toledano para lograr el billete para Tokio. Además, el combinado nacional se lo juega a dos cartas, una a principios de mayo y otra afinales.