Negativo el primer análisis por el 'pinchazo' en la Vega

J.S. Rodríguez
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En la prueba de orina realizada en el hospital no se ha detectado la presencia de drogas que provoquen sumisión química. Se está pendiente del análisis de sangre. La mujer tiene intención de formalizar hoy la denuncia.

Interior de la carpa instalada en el paseo de la Vega donde la mujer fue atendida en un primer momento.

Los primeros resultados de las pruebas realizadas anoche a la mujer que fue derivada por Protección Civil al hospital universitario al presentar un cuadro compatible con una agresión por pinchazo mientras asistía al concierto de Juan Magán han dado negativo. En concreto, en el análisis de orina realizado se ha descartado la presencia de sustancias estupefacientes que pudieran provocar un estado de sumisión química en la víctima. Queda por conocer el resultado del análisis de sangre, que ha sido remitido al Instituto Toxicológico de Madrid. Así lo han confirmado a La Tribuna fuentes de la Consejeria de Igualdad, que añaden que les consta que la mujer iba a interponer la correspondiente denuncia, aunque al medidodia de hoy no había constancia de que ya la hubiera formalizado. 

La alarma saltó en la noche de ayer en la carpa presurizada portátil que Protección Civil de Toledo instaló en el paseo de la Vega durante el concierto de Juán Magán. Hasta allí se desplazó una mujer con un cuadro de desorientación que la impedía comunicarse y presentaba una marca compatible con un pinchazo, por lo que se aplicó el protocolo y fue trasladada por Cruz Roja al hospital para realizar las pruebas médicas que determinaran si se trasteaba de un caso de de agresión por sumisión química mediante un pinchazo. Una segunda joven acudió  también al puesto de Protección Civil asegurando que había sido pinchada con un objeto punzante, pero prefirió abandonar la carpa por voluntad propia. 

Ante la alarma social que se está creando por los pinchazos, el Consejo de Gobierno de la Junta del pasado martes abordó esta cuestión. Por un lado, el Gobierno regional aprobó un protocolo de actuación para coordinar lo que se debe hacer cuando una víctima se presente en un punto violeta, un centro de salud o llame al 112. Por otro lado, la Junta tomaba la decisión de personarse como acusación personal si en algún caso se produjera una agresión sexual. Esta medida se concretará en la próxima reunión del Ejecutivo autonómico. 

La administración regional tenía contabilizados hasta el martes una decena de casos en Castilla-La Mancha. En ocho de ellos, las víctimas son  mujeres y en otros dos son varones. Asimismo, en ocho casos ha habido denuncia y en otros dos todavía no y no se sabe si finalmente habrá. En cuanto a los resultados de las pruebas para determinar si ha habido intentos de sumisión química, han dado negativo en todos los casos, aunque había dos  pendientes de los resultados.